Grandes empresas españolas presentes en Latinoamérica, como Telefónica, Repsol YPF o BBVA, se mostraron convencidas ayer de que la región está en buenas condiciones para superar la crisis sin entrar en recesión.
«Esta será la primera crisis económica global en que Iberoamérica no va a caer en recesión», dijo el presidente del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA), Francisco González, en su intervención en la inauguración del X Foro Latibex en Madrid.
González, al igual que el presidente de Telefónica, César Alierta, y el presidente de la petrolera Repsol YPF, Antonio Brufau, se mostraron convencidos de que «la región va a seguir creciendo», aunque a menor ritmo que los últimos años.
Tras un lustro creciendo a un ritmo de un 5%, el presidente del BBVA señaló que su entidad prevé un aumento de un 2%, manteniendo a Latinoamérica como «una de las pocas regiones del mundo con crecimiento positivo».
El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé un crecimiento de 2,5% en la región en 2009, según su último pronóstico difundido a comienzos de noviembre.
«Latinoamérica es la región que más va a crecer en los próximos años», aseguró Alierta, cuya compañía prevé invertir en el periodo 2007-2010 un total de 11 mil millones de euros.
«Las cosas se están haciendo bien en los fundamentos macroeconómicos», dijo Brufau, para quien en los últimos años los países latinoamericanos han sabido combinar políticas económicas rigurosas con un buen aprovechamiento de la bonanza económica internacional, especialmente gracias a los altos precios de las materias primas, una de sus principales exportaciones.
Esto último ha permitido a los países exportadores hacerse con reservas de divisas que les pueden permitir hacer frente a imprevistos financieros.
El presidente de Repsol YPF se quejó, no obstante, de la postura intervencionista de algunos países, sin citarlos, que «todavía hoy se plantean la intervención del Estado para compensar, para mitigar las fuerzas de la economía libre».
Tanto Brufau como González y Alierta se mostraron convencidos de que Latinoamérica seguirá siendo una «fuente de crecimiento mundial» en los próximos años, en gran parte debido a su demografía.
«Latinoamérica experimentará en las próximas décadas un crecimiento positivo de la fuerza de trabajo, tanto por juventud de su población como por la incorporación de más mujeres al mundo laboral», según González.
A ello se añade, según Alierta, que en los últimos años «se ha producido un cambio social espectacular en el que más de 47 millones de personas han salido de la pobreza y más de 20 millones de hogares se han incorporado a las clases medias».
Según Alierta, «es una sociedad joven, cosmopolita y dinámica», cada vez mejor preparada con las mejoras en educación.
Junto a la mano de obra, González consideró que «el crecimiento del mundo en desarrollo, especialmente en Asia, se traducirá en una mayor demanda de alimentos, energías y materias primas industriales, aumentando los ingresos y atrayendo las inversiones del exterior».
No obstante, el presidente del BBVA advirtió que los peligros principales para los países latinoamericanos son que «sus exportaciones están concentradas en unas pocas materias primas y en algunos países», algunos servicios públicos como educación, sanidad o vivienda, que no cumplen bien su papel, o la mala redistribución de la riqueza.