La discusión social en Guatemala


Edgar-Balsells

Esta semana tiene lugar la Asamblea anual de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales –FLACSO–, en ciudad de Guatemala. El día de ayer por la tarde tuvo lugar la discusión sobre el futuro de las ciencias sociales en América Latina, en un foro celebrado en la sede de la Facultad, y que ha contado con la participación de los directores de diferentes sedes latinoamericanas.

Edgar Balsells


El evento y la presencia de FLACSO en Guatemala reviste un interés especial en estas épocas de quiebre de expectativas y de  incertidumbre con respecto al futuro. Y es que como nos lo dice el renombrado tratadista catalán Josep Fontana: “El Futuro es un País Extraño”, porque de forma evidente es manifiesta la crisis social de comienzos del Siglo XXI.

Los humanos nos enfrentamos hoy en día ante “la gran divergencia”, término éste estudiado por Fontana y que proviene de diversos análisis efectuados por el reconocido economista estadounidense y Premio Nobel Paul Krugman: se trata de un proceso por el cual se produjo, dice Fontana, el enriquecimiento gradual de los más ricos, y el empobrecimiento de todos. Por ejemplo, en los Estados Unidos, entre 1973 y 2011 la productividad creció en un 80 por ciento, mientras que los salarios lo hicieron en un 11 por ciento.

Y además, dice Fontana, los políticos cumplen además su cometido encargándose de rebajar sistemáticamente los impuestos a las grandes fortunas y toleran las argucias legales que los más ricos utilizan para no pagarlos. Asistimos así a una irracionalidad de las políticas que en términos económicos han resultado incapaces de crear puestos de trabajo. Es por ello que la discusión social se hace urgente y de gran actualidad.

En el ámbito de la coyuntura guatemalteca, según la Revista Análisis de la Realidad Nacional del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos, la política democrática continuó caminando sobre el filo de la gobernabilidad, y así lo dice textualmente tal órgano investigativo: se observa pérdida de manejo de la capacidad institucional del Estado, la deuda total entró en un umbral de riesgo, y es así que los escenarios no son halagüeños.

Hoy es más que nunca válido ese centenario dilema que trata de explicar si las sociedades son armoniosas y ordenadas, como se pregunta Anthony Giddens, en su leído tratado sobre Sociología, o bien están marcadas por un conflicto permanente. Y añade Giddens: los conceptos de ideología y poder son sumamente importantes para dirimir sobre esos dilemas que no son mutuamente excluyentes.

Es así como el análisis del desarrollo social moderno, reviste especial interés para América Latina y para Guatemala especialmente, que es el entorno que más nos interesa. El estudio de la acción social es una tarea apasionante y es por ello que se necesita de la academia y de centros de pensamiento que estén comprometidos con el quehacer científico en todas sus dimensiones, y por supuesto con la aplicación de la ciencia y la tecnología en beneficio de la sociedad y con pleno respeto al uso inteligente de los recursos naturales.

Hace muchos años un grupo de guatemaltecos entusiastas nos hicimos esas mismas preguntas y fundamos FLACSO, centro de pensamiento que hoy es toda una realidad que hay que cuidar y fortalecer.