La crisis energética


Douglas Catalán.

Este tema no sólo le concierne a Guatemala si no que a todo el mundo. Las alternativas son pocas, pero hay dos muy buenas y limpias que son gratis, la energí­a solar y la eolí­tica que si en Guatemala existiera la voluntad para el uso de este tipo de energí­a, nuestro paí­s fuese más verde, sano y alegre. En Guatemala se sabe poco de este tipo de recursos, pero en los paí­ses industrializados se ha comprobado su eficacia y su ayuda al medio ambiente (no como las hidroeléctricas, que arruinan los ecosistemas). El beneficio de éstas es muy positivo, ya que se podrí­a importar carros eléctricos e hí­bridos que emiten pocos gases, y nos harí­an no tan dependientes del petróleo, además, bajar los precios de la electricidad y se podrí­a crear un mejor ambiente para crear empleos. Del tan afamado etanol sé que no es una buena inversión porque se erosionan los suelos y se gastan cantidades vastas de agua, además, las condiciones de trabajo no son buenas. En el futuro veremos paneles solares en casas y molinos en los cerros, generando «energí­a limpia», esperando que intereses particulares no hagan de algo que es gratis y natural, un monopolio.