La crisis económica que golpea Gran Bretaña podría desencadenar un alza de la criminalidad y acrecentar las tensiones raciales que son caldo de cultivo para el terrorismo, señaló un memorándum del ministerio británico del Interior filtrado a la prensa.
El documento interno del ministerio del Interior alerta que una recesión genera condiciones que provocan el aumento de actos racistas y el reclutamiento de nuevos elementos por grupos islámicos.
Ante el aumento del desempleo, «podemos prever un incremento de la hostilidad hacia los inmigrantes», se lee en el memorándum titulado «Respondiendo a desafíos económicos».
El gobierno reaccionó a la publicación del documento asegurando que su contenido no había sido aprobado por la ministra del Interior, Jacqui Smith, y que no había sido enviado al primer ministro, Gordon Brown.
El documento fue filtrado a la prensa después de una explosiva entrevista dada al diario The Guardian por el ministro de Finanzas del Reino Unido, Alistair Darling, en la que reconoció por primera vez la gravedad de la situación por la que atraviesa la economía británica.
«Se podría decir que es la peor» crisis en 60 años, y que probablemente será «más profunda y prolongada» de lo previsto, admitió Darling, que vaticinó que «los próximos doce meses serán el periodo más duro en décadas».