El Washington Post hablaba ayer de la noticia en primera página: el anuncio del compromiso entre Guillermo de Inglaterra y su novia de toda la vida, Kate Middleton, parece inminente.
El diario norteamericano, incluso, se atrevía a adelantar una fecha y contaba que este fin de semana se iba a fijar el día. Según la página oficial de la casa real británica, Guillermo tiene hoy una cita con militares veteranos en Epsom, pero la semana próxima está libre de actos oficiales.
Desde hace meses se viene hablando en Inglaterra de que el anuncio de la boda del heredero del trono británico se iba a producir en la primera quincena de junio. La pareja inició su relación hace siete años, aunque en 2007 estuvieron unos meses separados. Ambos tienen 28 años y se conocieron en la universidad.
Kate Middleton, hija de una familia de clase media británica, ha trabajado como dependienta y ahora lo hace en una empresa de su familia. La joven cuenta con la aprobación de la reina Isabel, que incluso hace meses pidió a los medios de comunicación que dejaran espacio a la pareja, demasiado perseguida por los fotógrafos.
Guillermo ha dicho a sus amigos que el día que se comprometa regalará a su novia un anillo de su madre Diana de Gales. El nieto de Isabel II es uno de los miembros de la familia real británica mejor valorado, por delante incluso de su padre.