Kim Jong Il, el enigmático líder norcoreano que gobernó su empobrecido país con puño de hierro mientras desarrolló un programa nuclear armamentista, ha muerto. Tenía 69 años.
La muerte de Kim fue anunciada hoy por la televisión estatal de la capital norcoreana, Pyongyang.
Se cree que Kim sufrió un ataque en el 2008, pero parecía relativamente vigoroso en fotos y videos de recientes viajes a China y Rusia, y en numerosos viajes por todo el país cuidadosamente documentados por la prensa estatal. Al mandatario le gustaban los cigarros y el coñac, y se cree que había sufrido diabetes y enfermedades cardíacas.
Impredecible, elocuente, fanático del cine y amante de la buena cocina, Kim era famoso por haber heredado el poder tras la muerte de su padre, pero poco se conocía de su vida diaria.
En el extranjero, muchos consideraban al rechoncho Kim un dictador despiadado que buscaba producir armas atómicas mientras su pueblo se muere de hambre. Pero en el país, la prensa estatal elogiaba al «Querido Líder» como un general prodigioso y la «Estrella Guía del siglo XXI».
El retrato de Kim está colgado junto al de su padre en los hogares y edificios públicos norcoreanos, y sus escritos, mayormente elogios de la grandeza de su padre y llamados a la defensa del socialismo, son reportados y difundidos a diario por los medios electrónicos.
Los detalles biográficos sobre Kim son escasos. El líder norcoreano pocas veces aparecía en público y su voz era escuchada en escasas ocasiones. Pero desertores de Corea del Norte lo describían como un orador elocuente e incesante, principalmente ante unidades militares que forman la base de su apoyo.
El esquivo Kim asumió el poder en 1994 luego de la muerte de su padre, Kim Il Sung, el dictador y fundador del país. Fue la primera transferencia hereditaria de poder en un país comunista, y ambos Kim son venerados en un profundo culto a la personalidad implementado por el régimen, que no tolera disensiones.
Kim Jong Il se centró en las fuerzas armadas en su credo político, dedicando gran parte de los escasos recursos del país a sus tropas: el Ejército del Pueblo, que con 1,1 millones de miembros es la quinta mayor fuerza militar en el mundo.
Esa política se reflejó claramente en los esfuerzos de Kim por producir armas nucleares, que culminaron con la primera prueba atómica norcoreana en octubre del 2006.
Corea del Norte sufrió hambruna y pobreza a mediados de la década de 1990 y se piensa que hasta dos millones de personas murieron después que se perdió la ayuda soviética, lo cual fue exacerbado por desastres naturales y métodos agrícolas anticuados.
Kim culpaba de los problemas a potencias extranjeras, y el país transmite a diario propaganda contra Estados Unidos y Japón.
Su imagen es conocida en todo el mundo: de corta estatura y regordete, usaba zapatos de plataforma y llevaba el cabello peinado hacia arriba para parecer más alto. Su vestuario solía consistir en trajes de kaki y gafas oscuras.
Se dice que era un fanático del cine y poseía unas 20.000 películas extranjeras. Al parecer produjo varias películas, mayormente epopeyas históricas con tono ideológico.
Dictador con ambición nuclear
Kim Jong Il, el voluble y enigmático líder norcoreano cuyo puño de hierro y ambiciones nucleares dominaron los temores por la seguridad mundial durante más de una década, ha muerto. Tenía 69 años.
La muerte de Kim 17 años después de que heredó el poder de su padre fue anunciada el lunes por la televisión estatal de la capital norcoreana, Pyongyang. Se cree que el «Querido Líder» del país, con reputación de que le gustaban los habanos, el coñac y la alta cocina, tenía diabetes y enfermedades cardíacas.
Corea del Norte ha estado preparado al tercer hijo de Kim para heredar el poder de su padre en el empobrecido país que festeja a la familia gobernante con un intenso culto a la personalidad.
La antigua búsqueda de armas nucleares por parte de Kim y las repetidas amenazas de su ejército a Corea del Sur y Estados Unidos han provocado temores de que pueda volver a estallar la guerra en la península coreana, o de que Corea del Norte pueda proveer armas de destrucción masiva a movimientos terroristas.
Corea del Sur puso a sus fuerzas armadas en «alerta máxima» y el presidente Lee Myung-bak convocó a una reunión del consejo de seguridad nacional después de la noticia de la muerte de Kim. Las dos Coreas permanecen técnicamente en estado de guerra más de 50 años después de que el conflicto armado de tiempos de la Guerra Fría en la península terminó con un cese al fuego.
Se cree que Kim sufrió una apoplejía en el 2008, pero aparecía relativamente vigoroso en fotos y videos de viajes recientes a China y Rusia, y en numerosas giras por el país cuidadosamente documentadas por la prensa estatal.
Kim Jong Il heredó el poder tras el deceso de su padre, el reverenciado fundador de Corea del Norte Kim Il Sung, quien murió en 1994. El se había estado preparando durante 20 años para liderar a la nación comunista fundada por su padre guerrillero y convertido en político, y forjada de acuerdo con el principio de «juche», o autosuficiencia.
En septiembre del 2010, Kim Jong Il reveló como su sucesor a su tercer hijo, el veinteañero Kim Jong Un, al instalarlo en puestos de alto rango.
Incluso con un sucesor, observadores de Corea del Norte temen una posible batalla por el poder tras bambalinas o una inestabilidad nuclear tras la muerte de Kim.
Pocos hechos confiables están disponibles cuando se trata de Corea del Norte, uno de los países más aislados en el mundo, y no hay muchas cosas claras sobre el hombre conocido como el «Querido Líder».
Según la leyenda norcoreana, Kim llegó al mundo en el Monte Paekdu, uno de los lugares más apreciados en Corea, en 1942, en un nacimiento anunciado en el cielo por un par de arco iris y una nueva estrella brillante.
Los registros soviéticos, sin embargo, indican que nació en Siberia, en 1941.
Kim Il Sung, quien durante años peleó desde Rusia por la independencia coreana del dominio colonial de Japón, emergió como un líder comunista luego de volver a Corea en 1945 después de que Japón fue derrotado en la Segunda Guerra Mundial.
Con la península dividida entre el norte, bajo administración soviética, y el sur, que era dirigido por Estados Unidos, Kim llegó al poder como el primer líder norcoreano en 1948 mientras Syngman Rhee se convirtió en el primer presidente de Corea del Sur.
El norte invadió al sur en 1950, con lo que desató una guerra que duró tres años, dejó millones de civiles muertos y dividió a la península a través de una Zona Desmilitarizada que actualmente sigue siendo una de las más fuertemente fortificadas en el mundo.
En el norte, Kim Il Sung fusionó la ideología estalinista con el culto a la personalidad que los abarcó a él y a su hijo. Su retrato está colgado en cada edificio de Corea del Norte y en la solapa de cada burócrata norcoreano.
Kim Jong Il, graduado de la Universidad Kim Il Sung de Pyongyang, tenía 33 años cuando su padre lo apuntó como su eventual sucesor.
Incluso antes de que asumiera el poder, había señales de que el joven Kim mantendría, y quizá superaría, la línea dura del gobierno de su padre.
Corea del Sur acusó a Kim de ser el autor intelectual de una explosión en 1983 que mató a 17 funcionarios surcoreanos que visitaban Birmania, ahora conocida como Myanmar. En 1987, una bomba en un vuelo de Korean Air mató a 115 personas a bordo; un agente norcoreano que confesó haber plantado el artefacto dijo que Kim fue quien ordenó derribar el avión.
Kim Jong Il asumió el poder luego de la muerte de su padre en 1994, y eventualmente asumió el puesto de presidente de la Comisión Nacional de Defensa, comandante del Ejército del Pueblo de Corea y cabeza del gobernante Partido del Trabajo mientras que su padre permanecía como «presidente eterno» de Corea del Norte.
Fiel a su padre, mantuvo la política de «Primero el Ejército», otorgando buena parte de los recursos del país a sus tropas, incluso cuando el pueblo padeció una prolongada hambruna, y construyó el quinto ejército más grande del mundo.
Kim también buscó construir un arsenal de armas nucleares, que culminó con la primera prueba nuclear subterránea de Corea del Norte en octubre del 2006. Se realizó otra prueba en el 2009, lo que provocó sanciones de Naciones Unidas.
Alarmados, los líderes regionales negociaron un pacto de desarme que Corea del Norte firmó en 2007 y empezó a implementar más tarde ese año.
Sin embargo, el proceso continúa estancado aunque los diplomáticos intentan reiniciar las negociaciones.
Corea del Norte, afectada desde hace mucho tiempo por sanciones e incapaz de alimentar a su población, necesita ayuda desesperadamente. Las inundaciones en la década de 1990 que destruyeron las tierras cultivables del montañoso país dejaron a millones de hambrientos.
Tras la hambruna, la cantidad de norcoreanos que huyen del país a través de China se incrementó dramáticamente, con muchos que contaban historias de hambre, persecución política y abuso de los derechos humanos que funcionarios en Pyongyang han negado enfáticamente.
Kim frecuentemente ha culpado a Estados Unidos de los problemas de su país y su régimen rutinariamente se burla de Corea del Sur, aliado de Washington, llamándolo «títere» de la superpotencia occidental.
El presidente estadounidense George W. Bush, que asumió el cargo en el 2002, denunció a Corea del Norte como miembro de un «eje del mal» que también incluyó a Irán e Irak. Más adelante describió a Kim como un «tirano» que mataba de hambre a su pueblo para poder construir armas nucleares.
Kim era un líder enigmático. Pero desertores norcoreanos lo describen como un orador elocuente e infatigable, sobre todo ante las unidades militares que forman la base de su apoyo.
El mejor vistazo al que el mundo tuvo acceso llegó en el año 2000, cuando la conciliadora política del liberal gobierno surcoreano hacia el norte culminó en la primera cumbre entre las dos Coreas y, después, en un inédito nivel de cooperación entre los dos países.
Una segunda cumbre se celebró en 2007 con Roh Moo-hyun como gobernante de Corea del Sur .
Sin embargo, el deshielo en las relaciones acabó a principios del 2008 cuando el presidente conservador Lee Myung-bak asumió el poder en Seúl y prometió mano dura hacia la comunista Corea del Norte.
En contra de los relatos que lo describían como «peculiar», la ex secretario de Estado Madeleine Albright retrató a un Kim inteligente y bien informado, al decir que los dos tuvieron variadas discusiones durante sus visitas a Pyongyang cuando Bill Clinton era presidente de Estados Unidos.
Se decía que Kim cultivaba diversos intereses, incluyendo el basquetbol profesional, los coches y las películas extranjeras. Según informes, produjo varias películas norcoreanas, la mayoría de ellas epopeyas históricas con un tinte ideológico.
Un director de cine surcoreano incluso afirmó que Kim lo secuestró a él y a su esposa, una estrella de cine, a finales de la década de 1970 para llevarlos a Corea del Norte a fin de hacer películas para él durante una década antes de que lograran escapar de sus guardianes norcoreanos durante un viaje a Austria.
Kim rara vez viajaba al extranjero, y sólo en tren, a causa de un supuesto temor a volar.
El estado civil de Kim no estaba claro, pero se cree que se casó una vez y que tuvo por lo menos otras tres compañeras. Tuvo al menos tres hijos con dos mujeres distintas, así como una hija con una tercera.
Se cree que su hijo mayor, Kim Jong Nam, de 38 años, cayó en desgracia con su padre después de que lo descubrieron mientras intentaba entrar a Japón con un pasaporte falso en el 2001 y decía que quería visitar un centro turístico de Disney en Tokio.
Sus otros dos hijos con otra mujer, Kim Jong Chol y Kim Jong Un, son veinteañeros. Su madre habría muerto hace varios años.