Siete hombres de entre 24 y 29 años comparecieron hoy ante un tribunal de Magdeburgo (este), acusados de quemar el año pasado en una plaza pública un ejemplar de «El diario de Ana Frank», testimonio de referencia de la persecución de los judíos durante el nazismo.
Juzgados por incitación al odio racial y afrenta a la dignidad de los muertos, los acusados son simpatizantes de la extrema derecha.
En el primer día del juicio, el acusado principal, Lars K., de 35 años, reconoció haber quemado el libro, pero negó haber querido con este acto relativizar o negar la persecución de los judíos.
El fiscal Arnold Murra recordó por su parte que el acusado había glorificado «la sangre alemana» y la «juventud alemana» durante este acto vandálico, que conmocionó a la sociedad.
Los jóvenes incendiaron el 24 de junio de 2006 «El diario de Ana Frank», así como una bandera de Estados Unidos durante una fiesta en Pretzien, cerca de Magdeburgo.
El alcalde de la ciudad fue criticado por asistir a la escena sin haberse opuesto a ella.
Ana Frank, nacida en Alemania, se refugió con su familia en Amsterdam con el fin de escapar de los nazis, antes de ser denunciada y deportada al campo de concentración de Bergen Belsen, donde murió en 1945 de tifus.
Su diario lleva vendidos 75 millones de ejemplares en el mundo.