En cuarto día del juicio en contra de Jacobo Salán Sánchez y Napoleón Rojas, acusados del desvío de Q30 millones del Ministerio de la Defensa, durante la gestión de Alfonso Portillo, un perito del Ministerio Público (MP), dio a conocer que gastos en dicha cartera fueron duplicados para ocultar su paradero.

Manuel Antonio Hernández Batres, auditor del ente investigador, declaró que dentro de los “gastos secretos” que la  cartera de Defensa decretó en esa época, figuraban fotocopias de facturas y contratos por Q9 millones, que en otro rubro justificaban otros gastos.

Los documentos contables de dicho Ministerio y el Crédito Hipotecario Nacional (CHN), confirmaron que en el año 2001, por medio de dos cheques fueron trasladados Q120 millones hacia esa entidad bancaria.

De ese monto, Q30 millones habrían sido trasladados por Salán y Rojas el 5, 6 y 9 de marzo del 2001. El perito del MP también afirmó que Q34.8 millones depositados en nueve cuentas del CHN fueron utilizados para el pago de sobregiros.

Ante el Tribunal Segundo de Sentencia Penal, Hernández Batres señaló que el dinero desviado de la Defensa, provino de trasferencias por modificaciones en el presupuesto de los Ministerios de Agricultura, Gobernación, Trabajo, Economía y otras instituciones.