Juan Pablo II se oponí­a a expulsar a curas pedófilos


Un ex obispo de la diócesis de Oakland, que en la década de 1980 escribió al Vaticano para reclamar la expulsión de un cura californiano acusado de pedofilia, aseguró que el papa Juan Pablo II se oponí­a en esa época a echar a sacerdotes, señaló el sábado el diario New York Times.


El ex obispo John Cummins explicó que en esa época la Iglesia se enfrentaba a la partida de muchos sacerdotes, lo cual hizo que el entonces Papa «enlenteciera el proceso» contra los acusados de pedofilia, según el cotidiano.

Una serie de cartas entre el Vaticano y la diócesis californiana de Oakland, de las que AFP obtuvo una copia el viernes, cuestionaban al actual papa, Benedicto XVI, por su falta de acción en la década de 1980 contra el cura californiano denunciado, pero no mencionaban al entonces papa, Juan Pablo II.

Según las cartas, el padre Stephen Kiesle habí­a pedido ser expulsado luego de reconocer sus abusos sexuales de menores, pedido enviado al Vaticano por el entonces obispo Cummins en 1981.

El Vaticano respondió que deseaba más información sobre el asunto. Cummins así­ lo hizo y las envió en febrero de 1982 al cardenal Joseph Ratzinger -hoy papa Benedicto XVI-, entonces jefe de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

Pese a las repetidas demandas de la diócesis de Oakland, recién el 6 de noviembre de 1985 Joseph Ratzinger respondió al obispo John Cummings.

En su respuesta, redactada en latí­n, el cardenal Ratzinger reconoce la «gravedad» de la situación pero se muestra reticente a tomar una decisión inmediata, preocupado por los efectos que podrí­a tener sobre «el bien de la Iglesia Universal».

Para el futuro Papa, el asunto debí­a ser objeto de «una atención particular, que requiere mucho tiempo».

Al leer la carta, el padre George Mockel, de la diócesis de Oakland, consideró que el Vaticano «se sentarí­a sobre el asunto hasta que Steve (Kiesle) envejeciera». «Creo que es lamentable», deploró.

El padre Kiesle fue finalmente expulsado en 1987.