La secretaria de Estado adjunta para Asuntos Hemisféricos de Estados Unidos, Roberta Jacobson, reafirmó hoy que Washington no cree que en este momento sea útil aplicar sanciones contra Venezuela y rechazó las acusaciones de injerencia en la política interna venezolana.
«Las sanciones son una herramienta útil en algún momento, pero no ahora», manifestó en una conferencia de prensa ofrecida en Asunción en el marco de la Asamblea General de la OEA.
Jacobson destacó asimismo que su país promueve el diálogo como herramienta para resolver el conflicto en Venezuela, donde más de 40 personas murieron desde febrero en el marco de las protestas contra el gobierno.
El martes, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, dijo que «la solución debe encontrarse sin presiones ni sanciones», en una directa referencia al proyecto de ley aprobado la semana pasada por la Cámara de Representantes de Estados Unidos que contempla sancionar a funcionarios venezolanos por la represión de las protestas.
El Senado también está estudiando una propuesta similar, aunque para convertirse en ley debe ser sancionada por el presidente Barack Obama, que descartó por el momento aplicar esta medida.
En su intervención ante la Asamblea de la OEA, el canciller venezolano, Elías Jaua, consideró que la amenaza de sanciones «es un obstáculo para avanzar en la lucha contra la pobreza».
El gobierno de Nicolás Maduro había anticipado que aprovecharía la cita de Asunción para denunciar la actitud «injerencista» de Estados Unidos en su política interior y que denunciaría que funcionarios de ese país están involucrados en un intento de magnicidio.
«Hay un intento permanente de las oligarquías que se niegan a aceptar resultados electorales y generan violencia, sabotajes y planes planes de magnicidio, alentados por sectores de Estados Unidos, en abierta violación al principio de no injerencia», fue la única referencia al tema de tensión con Washington.
Por su parte, Jacobson se limitó a responder que «las acusaciones de intervención del gobierno de Estados Unidos en el conflicto en Venezuela son falsas».
La representante de Estados Unidos ante la OEA, Carmen Lomellin, dijo en tanto que la inclusión de Cuba en la próxima Cumbre de las Américas, que se realizará en 2015 en Panamá, será debatida mañana en la reunión de la comisión preparatoria de cumbres.
«Estados Unidos desea que llegue el día en que pueda participar una Cuba democrática», afirmó.
La presencia de La Habana, demandada por varios países latinoamericanos, ha sido rechazada por Estados Unidos y Panamá.
La OEA reabrió sus puertas a Cuba en 2009 al levantarle la suspensión impuesta en 1962 a instancias de Estados Unidos. Desde entonces, sin embargo, La Habana ha declarado en reiteradas ocasiones que no tiene interés en volver a esa organización.