En el proceso judicial al cual están sometidos los militares José Efraín Ríos Montt y José Mauricio Rodríguez Sánchez, acusados del delito de genocidio, un testigo implícitamente intentó acusar de ese mismo delito, al militar Otto Pérez Molina; delito del cual habría sido víctima la etnia ixil, durante los años 1982 y 1983, cuando gobernaba Ríos Montt.
Si ese testimonio acusatorio tuviera alguna validez, hubiera sido posible predecir, con tolerable sensatez, que en la elección presidencial del año 2007 y en la del año 2011, en las cuales Pérez Molina fue candidato, acontecerían dos sucesos. El primero consistiría en que la etnia ixil manifestaría un inequívoco desprecio electoral por la candidatura de Pérez Molina. El segundo consistiría en que la etnia ixil manifestaría una inequívoca preferencia por el candidato de la beligerante fuerza defensora presunta del pueblo ixil; es decir, el candidato propuesto por la ex guerrilla.
No ocurrieron esos sucesos. En la primera elección presidencial del año 2007, Pérez Molina, aunque no fue el candidato ganador en el Triángulo Ixil, obtuvo un mayor número de votos que Rigoberta Menchú Tum, candidata de la ex-guerrilla. He aquí las cifras. En Chajul, Pérez Molina obtuvo 807 votos; y Menchú Tum, 223 votos. En Nebaj, Pérez Molina obtuvo 1,786 votos; y Menchú Tum, 631 votos. En San Juan Cotzal, Pérez Molina obtuvo 818 votos; y Menchú Tum, 78 votos. Aun en Uspantán, el municipio en donde Menchú Tum nació, Pérez Molina obtuvo 1,369 votos, y Menchú Tum, 405 votos.
En la primera elección presidencial del año 2011, Pérez Molina fue el candidato ganador, en el Triángulo Ixil; y Menchú Tum, quien por segunda vez fue candidata de la ex-guerrilla, fue perdedora. He aquí las cifras. En Chajul, Pérez Molina obtuvo 4,424 votos; y Menchú Tum, 357 votos. En Nebaj, Pérez Molina obtuvo 9,456 votos; y Menchú Tum, 791 votos. En San Juan Cotzal, Pérez Molina obtuvo 4,474 votos; y Menchú Tum, 79 votos. Aun en Uspantán, Pérez Molina, obtuvo 4,397 votos; y Menchú Tum, 457 votos.
En el Triángulo Ixil, en la primera elección presidencial del proceso electoral del año 2003, el candidato ganador fue Ríos Montt. Excluidas abusivas fantasías ideológicas, es inverosímil que, en ese proceso electoral, los ixiles le hayan conferido el triunfo electoral a quien presuntamente tenía el propósito de exterminarlos. También es inverosímil que, en el proceso electoral del año 2011, los ixiles le hayan conferido el triunfo a quien presuntamente había cooperado con aquel propósito de exterminio.
Empero, es verosímil que, en el Triángulo Ixil, Ríos Montt y Pérez Molina pudieran ser candidatos ganadores porque no hubo genocidio; y por consiguiente, no podía haber genocidio imputable a ambos militares. Y porque no hubo genocidio, los candidatos presidenciales de la ex-guerrilla no necesariamente tenían que ser gloriosos ganadores. Es decir, no podían tener la pretensión de ser los candidatos predilectos, por haber sido propuestos por quienes presuntamente, con beligerante ímpetu salvífico, habían luchado contra las terribles fuerzas genocidas que asediaban a los ixiles.
Post scriptum. En la primera elección presidencial del año 2011, el candidato Pérez Molina triunfó sobre el candidato de la ex-guerrilla, en 16 de los 21 municipios de Quiché. En la primera elección presidencial del año 2003, el candidato Ríos Montt triunfó sobre el candidato de la ex-guerrilla, en 20 de los 21 municipios de aquel mismo departamento.