Israel escaló de forma drástica la intensidad de su ataque aéreo en Gaza el jueves, alcanzando centenares de objetivos de Hamas mientras su sistema de defensa aéreo seguía interceptando cohetes. Los palestinos reportaron muertos en una casa y un café en la playa.
La ofensiva ha dejado en esta semana al menos 85 muertos, mientras el sistema de defensa misil nuevamente interceptó cohetes lanzados por milicianos palestinos en Jerusalén y Tel Aviv.
El vocero militar, teniente coronel Peter Lerner, dijo que Israel alcanzó más de 320 blancos durante la noche, principalmente redes de túneles y lanzacohetes emplazados en diversos lugares. Esto elevó el número de blancos alcanzados a 750 en una ofensiva en regla que ha matado a unos 80 palestinos.
Lerner dijo que Israel ha movilizado a unos 20.000 reservistas para una posible operación en tierra en Gaza, pero por ahora sigue concentrado en obtener el máximo resultado de su ataque aéreo. Una invasión terrestre podría provocar grandes bajas civiles del lado palestino y en el ejército israelí.
Ninguno de los dos bandos da señales de ceder en sus enfrentamientos más intensos desde una batalla de ocho días a fines de 2012. Israel dice que solo pensará en una tregua si Hamas deja de lanzar misiles. Los milicianos han lanzado centenares de cohetes a todo Israel, lo que ha trastornado la vida del país. No se han registrado heridos graves, y el sistema de defensa llamado «Domo de Hierro» ha interceptado al menos 70 de los proyectiles dirigidos a los centros poblados.
«La opción terrestre debe ser la última opción y solo en caso de absoluta necesidad. Es un plan de acción cuidadosamente diseñado», dijo Lerner.
El gabinete de seguridad israelí se reunía en las próximas horas.
El ministro de Defensa, Moshe Yaalon, dijo que la operación se desarrollaba según los planes.
«Las fuerzas armadas han obtenido éxitos significativos», dijo. «Continuaremos hasta que comprendan que esta escalada no les beneficia y que no toleraremos que disparen cohetes a nuestras poblaciones y ciudadanos».
Funcionarios médicos palestinos dijeron que un ataque el jueves por la madrugada alcanzó una vivienda en la ciudad sureña de Jan Yunis y mató a ocho miembros de la familia Al Haj.
El ejército dijo haber alcanzado un coche en Gaza en el que viajaban tres milicianos de Yihad Islámica que habían participado en el lanzamiento de cohetes, subiendo el número de muertos palestinos a, al menos, 85 personas.
Pide alto el fuego
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, pidió hoy un alto el fuego tras la escalada de la violencia en Cercano Oriente.
«Es más urgente que nunca antes encontrar puntos en común para volver a la calma y a un alto el fuego», dijo Ban ante el Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York.
Ban volvió a condenar la violencia por parte de ambas partes y llamó a las mismas a mantener la máxima contención. «Es inaceptable para los civiles de ambas partes tener que vivir permanentemente con el miedo al próximo ataque aéreo», dijo Ban.
«Me duele y nos debe doler a todos tener que volver vivir las mismas circunstancias que ya conocemos bien de las dos guerras de Gaza anteriores».