Las ciudades son para los ciudadanos, pero no lo son del mismo modo para todos. El pasado 3 de diciembre se celebró el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, pero ¿Guatemala realmente se preocupa por atender esta parte de la población? Las personas con discapacidad en nuestro país suman más de un millón y representan el 14% de la población, quienes siguen marginados, ya que se topan con barreras y obstáculos que no encuentra el resto de la población en tareas tan cotidianas como utilizar el transporte público, efectuar una gestión en algún banco o resolver un asunto sanitario entre otras.
Parte de los obstáculos a los cuales se enfrentan en su vida cotidiana configuran situaciones de discriminación que van desde su acceso a servicios básicos como la información, educación, la salud y el empleo, a la falta de una integración real, completa y efectiva en la sociedad. Cada vez hay más personas mayores, jóvenes y niños poblando nuestro país que están expuestos a la ola de violencia que se está viviendo en Guatemala; la cual les podría causar una discapacidad.
Creo que sería injustificable que cualquier persona pudiera ser relegada o discriminada por el resto de la población, si se tuviera acceso a las necesidades básicas que cualquier ciudadano debiese tener. ¿Se ha puesto a pensar que la vida nos puede cambiar radicalmente a causa de la violencia que se vive en Guatemala, por alguna enfermedad o accidente que pudiésemos tener? Soy un guatemalteco que soy parte de las estadísticas que adquirió una discapacidad a causa de la violencia de mi país y que jamás pensó estar en esta situación o que mi vida cambiaría radicalmente con un giro de 360 grados; de ser un seleccionado de baloncesto y representar a mi país en muchas oportunidades con apoyo de la Federación, pase a ser un atleta sin apoyo alguno, que de ser un estudiante regular en la universidad pasé a ser un estudiante irregular porque no puedo tener acceso libremente a las instalaciones, que de parar el transporte público en cualquier lado ahora en algunas oportunidades debo de tener la suerte que alguien me pueda llevar o esperar horas, que de poder asistir a cualquier actividad recreativa o deportiva, centros comerciales, cines o restaurantes tenga que preguntar si me puedo parquear o si puedo acceder. Este es el caso de miles de guatemaltecos que somos portadores de una discapacidad, por lo que el día de hoy espero que las personas que tengan acceso a leer este pequeño párrafo puedan hacer algo para cambiar la situación de muchos guatemaltecos que queremos vivir en una Guatemala accesible, libre de barreras arquitectónicas, y con las mismas oportunidades de salud, educación, empleo y recreación, Les hago la invitación a las personas de entidades privadas y gubernamentales, como a las que luchan por los derechos de las personas con discapacidad a que se unan y promuevan una Guatemala accesible y de mayor oportunidad; a que luchen día a día por encontrar la mejor solución para nuestro país; y que no solo el 3 de diciembre salgan a mostrar su cara que están haciendo algo por los que tenemos alguna discapacidad. NO HAGAN NADA POR NOSOTROS SIN NOSOTROS. Luchen día a día para salir adelante así como lo hago yo, y así poder tener una Guatemala libre de barreras con una cultura de respeto y paz. Y recuerden siempre “LA DISCAPACIDAD ES SIMPLEMENTE UN ESTADO MENTAL, LA DISCAPACIDAD VIVE EN TU MENTE, EN TUS IDEAS, EN DECIR NO PUEDO, SAL DE ELLA Y LUCHA”.