Irán y Gran Bretaña iniciaron hoy discusiones diplomáticas descritas como un primer paso para resolver la crisis provocada entre ambos países por la captura de 15 marinos británicos.
«El gobierno británico inició discusiones diplomáticas con el ministerio de Relaciones Exteriores iraní para resolver el caso de los militares británicos», anunció el martes Alí Larijani, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional iraní, citado por la Agencia Central de Información iraní.
«Estamos al principio del camino. Si esto continúa, lógicamente las condiciones pueden cambiar y se puede ir hacia una solución del caso» de los 15 marinos, afirmó, sin dar precisiones sobre dichas conversaciones.
Luego acusó nuevamente a Gran Bretaña de complicar la liberación de los 15 marinos con su actitud.
«Al principio estaba previsto que la cuestión de la detención de los marinos británicos se resolviera naturalmente en el marco de las relaciones bilaterales y que Londres reconociera su error para ayudar a solucionar el problema», afirmó.
«Pero ellos (los británicos) actuaron en forma diferente, como si la violación de las aguas iraníes fuera algo normal», insistió.
Pocas horas después, el primer ministro británico, Tony Blair, declaró que «las próximas 48 horas serán cruciales» y se congratuló por las «perspectivas» de progreso sugeridas por las declaraciones de Larijani.
«Lo importante es que traigamos de vuelta a esta gente», agregó sin embargo.
Desde el principio de la crisis, las autoridades británicas sostuvieron que sus marinos se encontraban en aguas iraquíes en el momento de su captura, mientras que Irán siempre afirmó que estaban en aguas iraníes.
Por su parte, Allaedin Borujerdi, presidente de la Cámara de Relaciones Exteriores del Parlamento iraní, pidió que Gran Bretaña envíe una misión «para dar explicaciones», citado por la Agencia Central de Información.
La televisión estatal mostró el lunes imágenes de los 15 marinos, afirmando que todos ellos habían «reconocido» que ingresaron ilegalmente en aguas territoriales de Irán.
Pero ahora los dos países insisten en su voluntad de llegar rápidamente a una solución diplomática.
«Nuestra prioridad es resolver (esta crisis) por la vía diplomática (…). Nosotros realmente pensamos que esta cuestión puede ser resuelta. Y no hay necesidad de un juicio», había declarado el lunes Larijani en el canal británico Channel Four.
A pesar de las «divergencias», Gran Bretaña comparte esta preferencia «por discusiones bilaterales rápidas para encontrar una solución diplomática», señaló en respuesta una portavoz del Foreign Office (cancillería británica).
«Los iraníes conocen nuestra posición», sostuvo el portavoz oficial de Tony Blair. «Ellos saben que las apariciones orquestadas en la televisión no afectarán a esta posición. Ellos saben que nosotros contamos con un fuerte respaldo internacional», agregó.
Por su parte, un ex embajador británico en Irán, Sir Richard Dalton, estimó el martes que no se debe esperar una liberación inmediata de los 15 marinos y que las conversaciones sobre el tema durarán por lo menos varios días más.
«Hago la advertencia para que no haya demasiadas esperanzas de que algo sucederá pronto. Todavía hay mucho que discutir», declaró el diplomático en la cadena de televisión BBC News 24.
La captura de estos 15 marinos –14 hombres y una mujer– el 23 de marzo agravó las relaciones entre Irán y los occidentales, que ya estaban tensas debido a la negativa iraní de suspender sus actividades nucleares sensibles.