Irán lanza su guerra contra Israel y EE.UU.


Videojuego. Varios niños se entretienen con un nuevo videojuego de guerra entre Irán, Israel y EE.UU.

Israel y Estados Unidos son el blanco a atacar en un nuevo videojuego lanzado ayer en Irán, cuyos protagonistas encarnan a agentes especiales encargados de liberar a diplomáticos y cientí­ficos nucleares iraní­es capturados por las fuerzas enemigas.


Los jugadores de «Operación Especial 85: Rescate de rehenes» se adentran en un mundo ficticio de contexto bien real, con un claro mensaje polí­tico sobre la polémica nuclear, el misterio de los diplomáticos iraní­es desaparecidos en Lí­bano y el odio de Teherán hacia Israel.

No es coincidencia que sus productores, la Organización de Estudiantes Islámicos, estuviera detrás de la famosa conferencia «Un mundo sin sionismo» que pronunció en 2005 el presidente ultraconservador iraní­, Mahmud Ahmadinejad, y en la que instó a «borrar del mapa» a Israel.

«En este juego, no estamos promoviendo ni el terrorismo ni la violencia. Al actuar para liberar a los rehenes iraní­es, promovemos el altruismo, la devoción y la defensa del paí­s», sostiene el secretario general de la Organización, Mohamad Taghi Fajrian.

La aventura virtual, estructurada en ocho niveles, empieza en Irak, donde un joven matrimonio, ambos cientí­ficos nucleares, ha sido capturado por las fuerzas de Estados Unidos mientras se encontraba de peregrinaje hacia el santuario chií­ta de Kerbala.

Un oficial iraní­ de operaciones especiales, Bahman Nasseri, es encargado entonces de rescatar a la pareja, Saeed y Maryam, encarcelada en Israel, enemigo jurado de Irán.

Gracias a su destreza, Nasseri penetra en territorio hebreo y localiza la prisión, donde no sólo se encuentra el matrimonio sino también otros cuatro iraní­es desaparecidos en la vida real en el norte de Lí­bano en 1982, durante la guerra civil.

Aunque la suerte de estos tres diplomáticos y un fotógrafo sigue sin esclarecerse, Teherán está convencido de que fueron entregados a Israel por las fuerzas cristianas libanesas y que siguen vivos.

Para ganar en el videojuego, hace falta completar los ocho niveles, es decir, matar a los soldados hebreos y estadounidenses, robarles sus ordenadores en los que guardan información secreta, y liberar a los seis iraní­es.

El jugador tiene derecho a utilizar el arma iraní­ AK-47, que lleva el agente Nasseri.

Para los perdedores que ’mueren’ en el intento, hay una segunda oportunidad. Deben pinchar sobre una bandera iraní­ que aparece en la pantalla con el lema «Con resistencia y ayuda, puedes hacer frente al enemigo».

Según Fajrian, la idea de lanzar el videojuego estuvo inspirada por el lí­der supremo iraní­, el ayatolá Alí­ Jamenei.

«Los videojuegos son medios culturales que tienen sus propios efectos positivos y negativos sobre los jóvenes. Durante nuestro último encuentro con el lí­der (Jamenei), nos dijo que buscáramos la forma de guiar a los niños y a los estudiantes», explica el secretario general de la Organización de Estudiantes Islámicos.

«Así­ que reflexionamos sobre el tema y llegamos a la conclusión de que los videojuegos es lo que más influye sobre los jóvenes», confí­a.