Es un tanto pintoresco escribir los artículos con palabras que denominamos “chapinismos” o “guatemaltequismos”; las mismas a veces ofenden la doble moral de personas que se consideran al ciento por ciento educadas, cultas, decentes, probas, ilustradas, instruidas o bien “léidas y escribidas”.

Sin embargo, con ellas logramos la comprensión perfecta que en nuestro medio debemos darle a algunas circunstancias que ocurren por casualidad o bien por la voluntad de personas que ejercen/ieron cargos administrativos y políticos de poder desde donde manejaron cantidades inmensas de dinero, de las cuales dispusieron como que si fuera su pisto personal.

Por eso, hoy abordo el tema de los mega hueveos, por los montos de dinero que han utilizado para piratear, camuflar, hurtar, estafar, defraudar y hueveárselos de la manera más descarada sin que alguna autoridad del Estado se atreva a tocarle los…   a los ladrones.

Para muestra van los siguientes: AEROPUERTO INTERNACIONAL LA AURORA.
Construido, remodelado, ampliado, remozado, internacionalizado, actualizado con “estándares de la IATA”, como usted quiera llamarle a las acciones humanas que con ocasión de hacer mejoras físicas a las instalaciones del aeropuerto derivaron en el escandaloso escamoteo de varios miles de millones de quetzales.

OCHENTA Y DOS MILLONES DEL CONGRESO DE LA REPÚBLICA, LOS AUTOBUSES URBANOS conocidos como LOS TOMATES, la “construcción” de la dársena de CHAMPERICO, la plata del INSTITUTO GUATEMALTECO DE SEGURIDAD SOCIAL. ¿Cuántos millones fueron allí? Sí, cerca de 350 y pico; el dinero desfalcado al INSTITUTO DE PREVISIÓN MILITAR? ¿Y la responsabilidad por firmar CONTRATOS LESIVOS AL ESTADO DE GUATEMALA? El caso de ferrovías en forma concreta.
 
En fin… son tantos  los mega hueveos que no alcanza el espacio para describirlos, pero…  ¿Habrá persona alguna en la Contraloría General de Cuentas y en el Ministerio Público, con rasgos de carácter, voluntad, valor y honradez para dirigir una investigación oficial al respecto?

Equipamiento de cuántas escuelas, dispensarios, hospitales, parques populares de recreación; acciones preventivas contra el crimen organizado, desorganizado e institucional pudieron haberse hecho, los problemas de desnutrición pudieron haber sido atendidos, mejoramiento de carreteras y puentes, instalación de hidroeléctricas del Estado para favorecer a la población de escasos recursos, ¡PÚCHICA! Pudo haberse hecho mucho, y aún están las actuales autoridades a tiempo para pedirles cuentas a los saqueadores y ladrones; ANTES DE QUE SE MUERAN. 
   
¿Quiénes son los responsables? ¿Estarán vivos aún? ¿Ya están en libertad? ¿Se podrán deducir las responsabilidades penales, civiles y administrativas; o  debemos callar y aceptar que lo hueveado, hueveado está, y punto? ¿Devolverán el dinero? Suena iluso pero… talvez, antes de que mueran pueda entambárseles, es decir ¡meterlos presos! Y obligarlos a que devuelvan el dinero que es del pueblo.