Carlos Aguilar, del Juzgado Segundo del Ramo Penal, esta mañana recibió la declaración de 90 personas afiliadas al Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), que denunciaron ser afectadas por el suministro de medicamentos genéricos que afectaron su estado de salud.
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El caso deriva de una denuncia presentada en abril del 2011, donde los afiliados aseguran que 28 amparos fueron interpuestos a su nombre, y sin su consentimiento, presuntamente por el abogado Mynor Omar Rosales, a quien señalan de los delitos de falsedad material e ideológica.
Las acciones legales que supuestamente fueron interpuestas por el mencionado concluyeron en fallos judiciales que ordenaron que a los pacientes se les recetara una medicina genérica, que entre otras afecciones, les causó alergias.
El Ministerio Público asegura que 15 de las personas que declararían dentro de este caso ya fallecieron, y otra cantidad igual de afectados se niega a presentar su testimonio ante el juzgado.
Para recibir los testimonios como prueba anticipada la judicatura agendó audiencias para siete días.
Con dichas declaraciones y otras investigaciones, el MP busca determinar si el consumo del medicamento genérico repercutió negativamente en la salud de los pacientes, que en su mayoría padece cáncer.