Inundaciones ya dejaron más damnificados que tsunami


Una vista aérea de las inundaciones en Sukkur, Pakistán. FOTO LA HORA: AFP ASIF HASSAN

Las inundaciones en Pakistán ya han dejado casi 14 millones de damnificados, más del doble que el número de afectados por el tsunami que devastó el sudeste asiático en 2004, declaró hoy un funcionario de Naciones Unidas.


Tanto el gobierno paquistaní­ como la ONU llamaron a reforzar la ayuda de emergencia, en tanto que el presidente Asif Ali Zardari -cuestionado por su ausencia durante este perí­odo de crisis- debí­a regresar al paí­s el lunes, después de una gira por varios paí­ses europeos.

«Esta catástrofe es peor que el tsunami (de 2004), el sismo de Pakistán en 2005 y el reciente terremoto en Haití­», señaló Maurizio Giuliano, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA).

«Es peor, ya que durante el terremoto de Pakistán de 2005 hubo más de 3 millones de damnificados, el tsunami afectó a 5 millones y el terremoto de Haití­ dejó 3 millones de afectados», agregó.

El número de muertos es sin embargo muy inferior, dado que, según la ONU, unas 1.600 personas perecieron en las últimas dos semanas y unas 500.000 se encontraban sin refugio sólo en la región del Punyab (centro).

El tsunami de 2004 habí­a dejado 220.000 muertos, principalmente en Indonesia y Tailandia.

La Autoridad paquistaní­ de Gestión de Catástrofes estima que en las regiones de Punyab y Jiber Pajtunjua (noroeste) habrí­a unos 12 millones de siniestrados. Cerca de tres millones se vieron afectados en el Sind (sur), llevando a unos 15 millones el número total de damnificados en este paí­s de 170 millones de habitantes.

El nivel de ayuda deberí­a ser «aumentar masivamente», indicó Martin Mogwanja, el coordinador humanitario de la ONU en Pakistán. «Faltan refugios, cubiertas de plástico y enseres domésticos. Las provisiones deben llegar con urgencia a las zonas afectadas», recalcó.

«Millones de personas han sufrido y se prevén más lluvias y se temen daños mayores. Llamo al mundo a que nos ayude», declaró el primer ministro Yusuf Raza Gilani durante una visita al Sind, añadiendo que la catástrofe desbordaba la capacidad de respuesta del gobierno.

Paí­ses como Estados Unidos, Gran Bretaña y Australia desbloquearon millones de dólares en ayuda, pero en el terreno las organizaciones caritativas musulmanas -algunas de ellas sospechadas de tener ví­nculos con grupos armados islamistas- eran más visibles que el gobierno.

Regiones enteras de Pakistán se encontraban incomunicadas el lunes, dificultando la ayuda humanitaria, indicaron las autoridades. Toda la región del valle de Swat -donde Pakistán llevó a cabo una ofensiva contra los insurgentes talibanes el año pasado- se encontraba aislada, así­ como parte del Penjab y del Sind.

A pesar de que los servicios meteorológicos anunciaban una disminución en la intensidad de las lluvias, miles de personas seguí­an siendo evacuadas el lunes hacia zonas más seguras.