Por una orden emanada del Juzgado Noveno de Primera Instancia Penal esta mañana fue capturado Wagnner Amílcar Morales Silva, sospechoso de haber participado en la muerte de los tres diputados al Parlamento Centroamericano.
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A dos meses de cometido el crimen en contra de los parlamentarios Eduardo D’Aubuisson, William Pichinte, José Ramón González y el conductor del vehículo donde éstos se conducían, el Ministerio Público y agentes de la Policía Nacional Civil efectuaron la sexta captura en el proceso judicial por ese caso.
En el parcelamiento La Mula, Flores Petén, las fuerzas de seguridad capturaron a otro de los supuestos responsables del cuádruple crimen, cometido el 19 de febrero recién pasado, se trata de Wagnner Amílcar Morales Silva de unos 35 años de edad.
De acuerdo a las declaraciones del fiscal a cargo de las investigaciones, Edwin Marroquín, ésta persona habría participado en la compra del combustible que se supone sirvió para la incineración de las cuatro víctimas.
«Esta persona ha sido detenida bajo orden emanada del Juzgado Noveno de Instancia Penal, él conjuntamente con otras personas que guardan prisión adquirieron la gasolina en el kilómetro 25, ruta a El Salvador, las pruebas que tenemos son suficientes; entre las evidencias establecidas son las fotografías tomadas en la gasolinera», aseveró el fiscal Marroquín.
El sindicado fue trasladado del aeropuerto de Petén hacia la Fuerza Aérea Guatemalteca, minutos más tarde bajo estrictas medidas de seguridad fue llevado a la Torre de Tribunales.
Sin emitir comentario Morales Silva tuvo que aguardar por unos minutos en el área denominada «El Gallinero», a la espera que el juez Nery Medina, recibiera su declaración.
Compraron gasolina
Mientras tanto, en la sala del Juzgado Noveno de Primera Instancia Penal, el juez contralor del proceso recibía la declaración de Mario Javier Lemus Escobar (a) «Yegua Arisca» y Obdulio Valdemar de León (a) «El Gato».
Según lo declarado por los dos procesados, el 19 de febrero en una gasolinera que se ubica en la ruta que conduce hacia El Salvador, a eso de las 14:00 horas habrían comprado unos diez galones de gasolina, que se supone les serviría para una camioneta de su propiedad que no servía.
«En efecto ese día realizamos una parada en la gasolinera que se encuentra en el cruce hacia Santa Elena Barillas, Villa Canales, porque mi sobrino (Obdulio Valdemar de León) se encontraba mal del estómago, él fue al baño, luego fuimos a la tienda de conveniencia a comprar sopas y algo para beber; posterior a eso mi sobrino me dijo que había que comprar gasolina para probar si así funcionaba la camioneta», expresó durante su declaración Lemus Escobar.
Esa versión también fue confirmada por Obdulio Valdemar de León quien dijo que el envase donde compraron el combustible le había costado cuarenta quetzales y que había sido adquirido en la misma gasolinera donde unas personas que se transportaban en un pick up rojo se lo vendieron.
El Ministerio Público realizó las preguntas respectivas, al igual que la defensa, por un lado el ente investigador aseguraba que existen suficientes medios de prueba en contra de los acusados, mientras los abogados defensores restaron importancia a lo dicho por el fiscal.
El final de la diligencia el juez Medina confirmó la prisión preventiva en contra de los acusados, el jurista argumentó que el MP presentó suficientes evidencias, por lo que las dos personas han quedado ligadas a proceso.
Mientras tanto el abogado defensor de Lemus Escobar y de León, Sandino ívila, dijo que el ente investigador no aportó mayores elementos probatorios y que apelarán al fallo.
«El Ministerio Público hace una sindicación en contra de mis patrocinados que no tiene fundamento, dice que mis clientes están vinculados por un trozo de madera encontrado en la supuesta escena del crimen», explicó ívila.
Uno de los acusados calificó de un show político las acusaciones que ha hecho el ente investigador en su contra, dijo no tener responsabilidad en los hechos que se le imputan.
Declaran agentes de presidios
Por la muerte de los cuatro ex agentes de la División de Investigación Criminal, Dinc, que fueron asesinados el 25 de febrero en la cárcel El Boquerón, en Cuilapa, Santa Rosa, este día en el Juzgado de Instancia Penal de esa región fueron escuchados doce elementos del Sistema Penitenciario.
El primero en declarar fue el agente Víctor Manuel Cano Boteo, encargado de llaves del penal.
«El día de la muerte de los policías a mí me tomaron como rehén, sólo puedo decir que me agarraron los integrantes de la mara 18», relató.
Otros agentes habrían mencionado que en las afueras del penal encontraron papeles donde se anunciaba un supuesto motín, y que en otras hojas supuestamente se pedía permiso por parte de reos para trasladarse a otros sectores.