Una febril y poco común actividad fue detectado por satélites estadounidenses en torno al complejo nuclear norcoreano de Yongbyon que se suponía debía haber sido cerrado el sábado, informaron el martes los servicios secretos y la prensa surcoreana.
Según el diario Dong-A Ilbo, las fotos de satélites tomadas el lunes fueron transmitidas a Seúl.
«Estados Unidos captó imágenes donde se muestran movimientos inhabituales de personal y vehículos alrededor de la torre de enfriamiento y en el estacionamiento del complejo de Yongbyon», indicó el diario.
Los servicios secretos surcoreanos, (NIS) que confirmaron actividades inhabituales, rechazaron sin embargo interpretarlos como el cierre inminente de la instalación.
El complejo nuclear de Yongbyon (norte), es la estructura central del arsenal atómico del régimen norcoreano que el sábado dejó pasar el plazo de dos meses fijado para cerrarlo.
Esta medida es un primer paso en el desmantelamiento del conjunto de las instalaciones nucleares en virtud de un acuerdo firmado el 13 de febrero en Pekín, al término de negociaciones a seis entre las dos Coreas, Estados Unidos, China, Japón y Rusia.
El regreso de los inspectores de la Agencia internacional de la energía atómica (AIEA), que Corea del Norte expulsó en 2002, forma parte también de los términos del acuerdo.
A cambio, Pyongyang debe recibir una importante ayuda energética.
Pero el régimen norcoreano plantea, como condición previa para respetar el acuerdo, la liberación de 25 millones de dólares de fondos bloqueados en un banco de Macao luego de acusaciones estadonidenses de blanqueo.
El dinero fue liberado del establecimiento pero su traslado efectivo se topa con detalles técnicos.
«Está claro que se trata de una cuestión entre Corea del Norte y su banquero», declaró el lunes el portavoz del departamento de Estado Sean McCormack después que Moscú acusó a Estados Unidos de tratar de frenar el arreglo dela cuestión nuclear.
Washington también dio a conocer que por petición de China, que aboga por la «paciencia» en este tema, se había acordado a Norcorea un plazo suplementario de unos días.
Según el ministerio surcoreano de Relaciones Exteriores, la secretaria de Estado estadounidense Condoleezza Rice se entrevistó por teléfono con su homólogo Song Min-Soon, y acordó «esperar aún unos días», indicó un responsable del ministerio.