Insulza: «Hay que combatir tráfico de armas además del de drogas»


Un soldado mexicano destruye armas y drogas incautadas a traficantes. Según el secretario de la OEA, se debe combatir estos dos tráficos, ya que son los que producen mayor violencia en Latinoamérica. FOTO LA HORA: AFP Ronaldo Schemidt

La violencia en América Latina es una «epidemia» que debe ser eliminada no solo combatiendo el tráfico de drogas desde Sudamérica hacia Norteamérica, sino también el tráfico de armas en la dirección inversa, afirmó el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza.


La violencia, que «atenta contra la seguridad, la salud y corrompe nuestra democracia, (…) es una amenaza que está vinculada con el tema de la pobreza», dijo Insulza la noche del lunes, en una clase magistral que dictó en el Instituto Interamericano de Derechos Humanos, con sede en San José.

Expresó que América Latina vive la amenaza de las bandas de narcotraficantes que llevan «drogas desde Sudamérica a Norteamérica», pero también existe un «tráfico de armas desde Norteamérica a Sudamérica» que favorece las altas tasas de violencia y homicidios en algunos paí­ses de la región.

Insistió en la necesidad de contener el tráfico de armas para frenar la violencia, que afecta particularmente a tres paí­ses centroamericanos –Guatemala, El Salvador y Honduras–, pero también inquieta a otros paí­ses como Costa Rica, donde las cifras de crí­menes vienen en aumento.

«Hay que buscar formas de limitar la cantidad de armas que los narcotraficantes adquieren. El flujo de armas desde el Norte por México y Centroamérica no está siendo detenido», expresó Insulza en una entrevista publicada este martes por el diario La Nación.

«Lo peor no es que las armas las produzcan unos malvados narcotraficantes, no: son armeros norteamericanos quienes venden las armas que después los narcotraficantes trasladan. Sin acción en este campo, vamos a tener un problema serio», añadió.

En su clase magistral, Insulza expresó que entre los 10 paí­ses donde se cometen más crí­menes en el mundo «más de la mitad» están en América Latina y dijo que si en las tasas de homicidios de algunas ciudades de la región se usaran los estándares de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se catalogarí­a como «epidemia».

«Hay una cantidad de ciudades (latinoamericanas) en que (la violencia) es una verdadera epidemia que alguna vez debemos enfrentar», declaró.

América Latina vive «una ola de criminalidad como nuestra región no habí­a conocido», añadió el funcionario.

Expresó que la OMS declara una epidemia cuando en un paí­s una enfermedad causa más de 100 muertos por un millón de habitantes, y que los homicidios superan esa cifra en nueve ciudades de la región, que no especificó.

Insulza dijo que si bien América Latina no ha sufrido guerras prolongadas entre dos paí­ses desde que Bolivia y Paraguay se enfrentaron en la Guerra del Chaco en la década de 1930, las cifras de homicidios cada año en algunos paí­ses superan a las de algunos conflictos bélicos.

El funcionario desarrolló una apretada agenda en su visita a Costa Rica, donde se reunió con la presidenta Laura Chinchilla, y abordó diversos temas de seguridad, derechos humanos y la situación en Honduras.

Insulza abogó por el regreso de Honduras a la OEA, tras ser marginada luego del golpe de Estado de 2009, y dijo que «en parte» ha mejorado el respeto a los derechos humanos en ese paí­s, aunque lamentó que tenga una de las más altas tasas de homicidios de la región.

«Hay que buscar formas de limitar la cantidad de armas que los narcotraficantes adquieren. El flujo de armas desde el Norte por México y Centroamérica no está siendo detenido.»

José Miguel Insulza

Secretario General de la OEA