Siete semanas antes de que los republicanos asuman oficialmente el control de la cámara baja, los legisladores de ambos partidos regresan hoy a labores para lidiar con una tensa disputa sobre impuestos y una larga lista de objetivos en un periodo postelectoral de sesiones que casi seguramente no arrojará resultados importantes.
Más de 100 novicios, mayormente republicanos, llegarán al Capitolio para aprender el funcionamiento del puesto que asumirán cuando comience el próximo Congreso en enero. Para los derrotados demócratas, hay otra nota triste: uno de sus miembros más venerables será enjuiciado por violaciones éticas.
Las sesiones postelectorales son usualmente impopulares e improductivas. Nada indica que vaya a ser diferente este año.
Los republicanos tienen la mira en enero, cuando tomarán las riendas de la Cámara de Representantes. Muchos legisladores demócratas y sus equipos están más concentrados en limpiar sus despachos y buscar nuevos empleos. Eso no significa que pueden descuidarse.
El Congreso debe actuar antes del fin del año sobre los recortes de impuestos de la era de George W. Bush para proteger a millones de personas de aumentos tributarios considerables.
Los legisladores no consiguieron aprobar ni siquiera una ley de gastos este año y se necesitan fondos para mantener funcionando a las dependencias federales y evitar un cierre del gobierno.
Los médicos, en tanto, enfrentan un agobiante recorte en los reembolsos por el programa Medicare, el programa gubernamental de asistencia médica para los ancianos.
Los demócratas aún tienen mayorías considerables en ambas cámaras y tienen otras ambiciones para la sesión. La mayoría no serán satisfechas.
Existen esfuerzos para dar a los beneficiarios de Seguridad Social un cheque de 250 dólares para compensar la ausencia de un incremento por costo de vida en sus pagos, extender los pagos por desempleo, permitir que los homosexuales presten servicio abiertamente en las fuerzas armadas, ratificar un tratado con Rusia de reducción de arsenales y extender el supervisión gubernamental de la seguridad de los alimentos.
El Congreso va a estar en sesión durante una semana, hará una pausa por el feriado de Acción de Gracias y regresará el 29 de noviembre. Los legisladores continuarán hasta que completen su trabajo o lo abandonen.
La mayor atención se centrará esta semana en actividades fuera de las salas del Senado y la cámara baja.
En un edificio de oficinas de la Cámara de Representantes, la comisión de ética iniciará el lunes el juicio contra el demócrata Charles Rangel, un representante de 80 años de edad que está acusado de numerosas infracciones.