Unas 930 familias de la comunidad Cerro de Oro, ubicada en Santiago Atitlán, Sololá, en el oeste de Guatemala, se beneficiaron a partir de este miércoles con el Programa Mi Familia Progresa, impulsado por el gobierno.
Las beneficiadas, en su mayoría mujeres tzutuhiles, recibieron del Gobierno un primer aporte económico de unos 20 dólares que se les otorgará cada mes con la condición que envíen a sus hijos al centro educativo del lugar; y en el caso que las indígenas tengan hijos menores de cinco años, tendrán que acreditar controles médicos para recibir otros 20 dólares mensuales.
«Es la primera vez que un gobierno se preocupa por la educación de nuestros hijos y de nuestra salud. Estamos muy contentas. El dinero lo voy a emplear para ropa y refacciones de mis hijas», afirmó, en su lengua materna y auxiliada por un intérprete, María Pú, quien a sus 19 años es madre de tres niños.
Cerro de Oro es una comunidad ubicada en las riberas del Lago de Atitlán y habitada por unos 6 mil indígenas tzutuhiles, el 85% de ellos viviendo en condiciones de pobreza extrema, pero que no pierden la esperanza de lograr el desarrollo.
Cristóbal Vásquez, alcalde auxiliar de esa aldea de Santiago Atitlán, detalló que las principales actividades económicas de esa área son la agricultura y la artesanía, sin embargo, esperan que las autoridades ayuden en proyectos turísticos, para explotar el paradisíaco Lago de Atitlán como atracción principal.
La inauguración del programa Mi Familia Progresa se realizó el miércoles de la semana pasada en Santa Cruz La Laguna, otra comunidad indígena ubicada alrededor del Lago de Atitlán y que está clasificada como una de las más pobres del país, según un informe de la actual administración gubernamental.