INCERTIDUMBRE Y ENGAÑO


Arnoldo Sequeiro Hidalgo, A-1 206718

A partir del miércoles 17 de enero de 2007, la palabra BANCO que fue sinónimo de CONFIANZA y SEGURIDAD se convirtió en sinónimo de INCERTIDUMBRE y ENGAí‘O para miles de guatemaltecos que confiaron en el BANCO DE COMERCIO sus ahorros y pensiones de toda una vida de trabajo y sacrificio.

La estafa del BANCO DE COMERCIO realizada con la venia de la Superintendencia de Bancos por más de 10 años y es inaceptable que el Superintendente de Bancos alegue en su defensa desconocimiento o que no fue informado, ya que las funciones de su cargo son la vigilancia e inspección de las operaciones tanto del BANCO DE COMERCIO como del resto de bancos del Sistema Bancario.

El Banco Industrial al cual le fueron entregados todos los activos y la Cartera de Crédito del BANCO DE COMERCIO, por medio de su Gerente General y el viernes 12 de enero de 2007 por medio de la televisión anunciaba que se pagarí­an todos los ahorros ya fueran de veinte mil o diez millones de quetzales, lo cual creó tranquilidad entre los jubilados ya que muchos de ellos tení­an sus ahorros y pensiones por montos de hasta un millón de quetzales amparados por Certificados de Custodia. El miércoles 17 de enero de 2007 se informa que todos los ahorros e inversiones amparados por los Certificados de Custodia eran ilegales y sin valor, extremo que lo ratifica en forma frí­a y cruel el Superintendente de Bancos en el Congreso de la República y que empuja a uno de los ahorrantes al suicidio por esta desalmada declaración.

La larga lista de fallecidos y los sufrimientos ocasionados a los afectados por la pérdida de sus ahorros y la nula respuesta del insensible Presidente de la República para resolver este grave problema, obliga a solicitar que se replantee en toda su dimensión, tanto dentro del Sistema Bancario, que ha perdido credibilidad, como dentro de nuestro régimen jurí­dico, ya que la Constitución Polí­tica que nos rige es clara en lo que se refiere a la obligación del Estado de proteger a los ahorrantes dentro del Sistema Bancario y el Superintendente de Bancos debe responder por el incumplimiento de sus deberes y negligencia en sus funciones.