Turquía propuso a la Unión Europea respetar parte de los compromisos de sus negociaciones de adhesión al bloque, ofreciendo la apertura de un puerto y un aeropuerto a los chipriotas griegos, un intento por evitar el estallido de una crisis en sus relaciones con la UE.
Turquía va a abrir un puerto y un aeropuerto a los navíos y aviones de bandera chipriota, anunció el jueves el portavoz Mikko Norros, cuyo país ejerce la presidencia rotativa de la UE.
A cuatro días de una crucial reunión de cancilleres de la UE que debe pronunciarse sobre una suspensión parcial de las negociaciones de adhesión con Turquía por la cuestión de las relaciones entre Ankara y Nicosia, la presidencia finlandesa saludó un gesto muy constructivo.
Una fuente de la presidencia precisó que a cambio de su oferta, Turquía esperaba un gesto de la UE para poner fin al aislamiento de la República Turca de Chipre del Norte (RTCN), establecida en 1974 cuando la Isla se dividió en dos y sólo reconocida por Ankara.
No es una condición, sino más bien una expectativa, insistió esta fuente que no quiso revelar su identidad.
Incluso si varios responsables europeos subrayaron que la oferta turca aún debía aclararse, reconocieron que podría constituir un avance importante en las relaciones UE-Turquía.
Si esas propuestas son constructivas, constituyen un elemento positivo, juzgó el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Frank-Walter Steinmeier.
Si ese paso se confirma, es evidentemente un paso muy importante en el sentido de la aplicación completa del Protocolo de Ankara, estimó de su lado el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.
En julio de 2005, tres meses antes de lanzamiento oficial de las negociaciones de adhesión a la UE, Turquía firmó ese protocolo que amplía su unión aduanera con la Unión Europea a los diez nuevos miembros que ingresaron en el bloque en 2004.
Sin embargo, Turquía se niega a aplicarlo con Chipre, país que no reconoce.
A raíz de esta negativa, la Comisión Europea recomendó el 29 de noviembre la suspensión de 8 de los 35 capítulos que integran el proceso de adhesión de Turquía a la UE.
De su lado, las autoridades turcas no quisieron confirmar el jueves la información concerniente a la oferta a Chipre.
Las conversaciones están aún en curso. No compartiremos los detalles con la prensa en esta etapa, declaró un portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores turco.
El silencio turco alimentó las especulaciones en la UE.
Según una fuente europea, la oferta de Ankara sería una apertura unilateral sin condiciones que constituiría ciertamente un acontecimiento nuevo.
Pero otras fuentes diplomáticas subrayaban que la propuesta tenía condiciones, como su duración de sólo un año, a la espera de una solución global del problema chipriota bajo los auspicios de la ONU.