Las pláticas educativas a menudo enfatizan la necesidad de preparar a los alumnos para someterse a los exámenes estandarizados en matemáticas y comunicaciones-lenguaje (Idioma español) y que alcancen calificaciones más altas. Las discusiones hacen una comparación entre los bajos resultados en Guatemala y en los mucho más altos en otros paí­ses, de acuerdo a los resultados de estos exámenes internacionales, que son publicados y dentro de los que Guatemala no participa; sí­ se conocen los resultados de los logros en otros paí­ses como por ejemplo Singapur y Japón.

Estados Unidos aparece menos, pero siempre es parte integral en esas discusiones. Mucho se ha escrito en relación a las diferencias entre cualquiera de esos paí­ses y Guatemala que siempre está en desventaja. Se habla y se escribe mucho sobre lo que debe hacer el Mineduc, pero las acciones adoptadas para una real transformación del sistema educativo son casi nulas. Sí­ se han ofrecido sugerencias de cambios, estos aislados de un conjunto de acciones de un plan general con visión del futuro educativo en Guatemala. Si la imitación de algunos aspectos educativos de otros paí­ses es importante, entonces ofrezco el siguiente modelo para la consideración de las autoridades. El modelo educativo del siglo XXI de Suecia. La educación KUNSKAPSSKOL que significa “La escuela del conocimiento”. El modelo está diseñado para individualizar la educación de cada alumno utilizando la tecnologí­a como medio para alcanzar semejante meta. La esencia del modelo dice “…Existimos (maestros) para los alumnos, más bien que los alumnos existan para nosotros”. A propósito, los maestros tienen dos tí­tulos universitarios, uno en su área de enseñanza y el otro en educación en sí­. ¿Cuándo lograremos que el maestro guatemalteco tenga por lo menos un tí­tulo universitario? ¿No creen que serí­a bueno este modelo para los alumnos de secundaria en Guatemala? El otro dí­a en una aldea cercana a la Capital, encontré a un muchacho de 22 años, que unos dí­as antes habí­a iniciado un nuevo trabajo. Platicando con él, le di una hoja para leer y para mi sorpresa, me dijo “no sé leer ni escribir”. Profundizando en la plática me contó que sus papás habí­an muerto cuando él tení­a dos años de edad y que sus abuelos lo criaron. Los abuelos, me dijo, no tuvieron suficiente dinero para mandarlo a la escuela. Continuó diciéndome que está casado y tiene un hijo de meses y de nuevo me sorprendí­ cuando me contó que su esposa tampoco lee ni escribe. Al terminar de hablar con él ya era la hora del almuerzo y su esposa se lo llevaba e iba cargando a su bebé; la acompañaba otra jovencita que también cargaba a un niño de nueve meses, me dijeron. Curioso como soy, le pregunté a la jovencita si el niño de nueve meses era de ella y me respondió que sí­. Le pregunté ¿Y cuántos años tiene usted? Me dijo: ¡Doce! Haciendo cálculos, si ella tiene 12, menos 9 meses del niño, menos 9 meses del embarazo ¿Cuántos años tení­a al momento de concebir al niño y que consciencia tení­a del hecho de tener relaciones sexuales? Me gustarí­a preguntarles a estudiantes de secundaria en Guatemala y a los otros muchachos de esta aldea, si tienen una alta autoestima. Si se gustan a sí­ mismos. Luego pensé si realmente sabrán lo que significa el concepto de autoestima. De repente también muchos de nosotros tendrí­amos dificultad en explicarlo. ¡Déjenme tratar de hacerlo! ¡ME GUSTO! ¿Cuánto me gusto a mí­ mismo? La autoestima se aprende desde los primeros años de vida. No se nace con ella. En las primeras instancias el niño aprende de los miembros de la familia. Esperemos que ellos digan “me gusto mucho”. Luego, y cada vez más, la creatura inicia su interacción con su medio ambiente y la relación con otras personas. Ese triángulo inicial “familia, entorno ambiental y personas”, formarán las bases para que el niño crezca diciendo “me gusto”. Eso significa que está satisfecho con todos sus aspectos sin olvidar que el crecimiento le proveerá momentos en que tendrá que saber manejar nuevas situaciones donde no estará tan satisfecho consigo mismo, especialmente en los años de la pre adolescencia y adolescencia. Regresemos. ¿Cómo trabajan los maestros a los alumnos, el tema de la autoestima, ME GUSTO y CUíNTO? ¿Será que es con los alumnos con quienes lo inician? Creo que debe ser al revés; deben iniciar el tema con los maestros mismos. Háganse esa pregunta: ¿ME GUSTO y CUíNTO? Los maestros deben tener una buena formación en ese sentido para poder demostrar su autoestima a sus alumnos. Los estudiantes en formación ven a los maestros como modelos de una autoestima positiva digna de imitar. Las oportunidades de demostrar cada uno su autoestima poniendo en práctica lo aprendido en los primeros años de vida en las aulas aplicándolo en las interacciones sociales. Por eso la autoestima es dinámica. La autoestima es una condición que cada individuo tiene en forma positiva o demuestra que no la tiene si en sus acciones no se respeta a sí­ mismo-no me gusto. Su comportamiento va a indicar cuál de las dos domina al alumno; por ejemplo: Si no se respeta a sí­ mismo, será muy difí­cil que respete a los otros alumnos y a los maestros y al crecer y llegar a ser un adulto, pues ya saben lo que sucederá. ¿Verdad? La semana entrante seré más especí­fico en mi entender de la autoestima. ¡ME GUSTO MUCHO!