Un periódico califica a la Usac, como un botín político y económico, es lamentable e indignante dicho calificativo para la Usac. ¿Por qué generamos esa mala imagen universitaria? Unas de las causas, es el nombramiento de representantes a muchas instituciones del Estado, que genera hambre de poder, que mueve a grupos oscuros para tener el control de esas representaciones.
¿Será correcto que los estudiantes quieran tener más poder que los maestros en la elección de las juntas directivas facultativas? La junta directiva hace nombramientos de profesores, administradores y decide sobre el presupuesto. Sus razones de justicia tendrán estos estudiantes, pero hay que ponderarlas y compararlas con lo que debe ser una universidad.
La universidad «es un lugar donde se enseña el conocimiento universal» (Newman), para que el estudiante lo aplique a casos concretos. La ciudad universitaria, es una ciudad docente, donde los maestros enseñan el conocimiento, para que los estudiantes con un buen aprovechamiento del tiempo logren su aprendizaje y lo comprenda de un modo perfecto y racional, complementado por las virtudes morales e intelectuales. Queridos jóvenes en huelga de hambre, no continúen con ello, están siendo instrumentalizados, regresen a clases con sus compañeros, para que con esfuerzo, estudio, orden y responsabilidad lleguen a ser profesionales universitarios de bien.