En la primavera del presente año, (2010) se están cumpliendo cien años del estreno del ballet «El Pájaro de fuego», primera obra de la famosa trilogía de Igor Stravinsky. La obra que abrió las puertas del mundo a este gran y talentoso compositor ruso. En conmemoración a este centenario, escribo estas líneas que llevan un recordatorio para los amantes del «Arte Sonoro» y especialmente para los que gustan de las obras de Igor Stravinsky, y para los que deseen conocer la música de este compositor genial que vio la vida el 17 de junio de 1882. El compositor que desconcertó con la tercera obra de su «Trilogía», La Consagración de la primavera que se estrenó el 29 de mayo de 1913 en el Teatro de los Campos Elisios de París, habiendo provocado el escándalo más grande del mundo en el campo de la música. Ahora que es grato compartir con los distinguidos lectores, la historia del ballet «El Pájaro de fuego» de Igor Stravinsky.
La idea de hacer un ballet sobre la fantástica leyenda rusa del Pájaro de fuego se le ocurrió a Diaghileff, cuya compañía encantó a todo París en 1906. En un principio Diaghileff pensaba que la música la escribiera Liadoff, pero a este le faltaba tiempo para hacerla, por lo que le dio el encargo al joven Stravinsky.
La partitura se terminó de escribir en la primavera de 1910 y la primera presentación en la í“pera de París por la famosa compañía, que constituyó un clamoroso éxito.
El Pájaro de fuego fue la primera gran obra de Stravinsky y le dio súbita fama. Arreglada como suite de concierto, pronto se convirtió en uno de los trozos más populares de nuestra época, y todavía es considerada por muchos como la obra más bella de su autor. La razón es quizá que hasta esta obra Stravinsky escribía de manera tradicional, utilizando métodos de expresión familiares al público por las composiciones de sus predecesores.
El Pájaro de fuego pertenece completamente a la escuela de Rimsky Korsakoff y presenta el mismo magnífico y fascinador color orquestal. Las melodías insinuantes y embriagadoras de Borodín, sus armonías orientales y su refinado cromatismo se refleja en los temas con que Stravinsky describe a Kostchei y su mágico mundo. En la «danza del Pájaro de fuego» hay la poesía de Scriabin (compositor ruso) y, en el final, la claridad tonal de Glinka y de Moussorgsky. En otras palabras: El Pájaro de fuego es una obra de época, una bellísima expresión poética del estilo musical histórico-folclórico ruso de 1910.
Pero Stravinsky utilizó consciente y consistentemente los estilos de sus maestros de manera peculiar. El héroe, el noble y justo príncipe ruso, está trazado en claras melodías y ritmos naturales y sin complicación, reservando para los elementos sobrenaturales un modo de expresión menos sencillo.
La belleza extraterrenal del pájaro de fuego está expresada en una mágica media luz impresionista con melodías cromáticas y trabajadas armonías, en tanto que la aspereza y la furia de Kostchei se describen con violenta sincopación y bárbaras melodías en heterogéneas escalas.
El cuento dice así:
«En el jardín del castillo del malvado mago Kostchei un árbol de manzanas de oro brilla a la luz de la luna. De pronto saltan hacia arriba innumerables llamas. Es el pájaro de fuego que se muestra un instante y desaparece. El joven Iván lo persigue y lo captura. El pájaro implora su libertad y se arranca una pluma que entrega al príncipe, quien lo deja escapar alegremente. Trece jóvenes princesas salen del castillo y una de ellas cambia tiernas miradas con Iván. Hace indicación a sus hermanas de que bailen y la danza termina con que el príncipe la abraza. Cuando el día clarea las jóvenes princesas han de volver al castillo. A pesar de sus advertencias, el príncipe decide ir tras ellas.
En el momento en que abre la puerta empiezan a sonar innumerables campanas y gongs. Del castillo iluminado por una ardorosa luz rojiza sale una muchedumbre con mantos flotantes. Cascos resplandecientes y joyas centellantes. Caballeros, esclavos, danzantes y bufones giran a fantástica velocidad, pero al aparecer Kostchei caen bruscamente de bruces en el suelo. El mago, al descubrir a Iván avanza hacia él para convertirlo en un pilar de piedra, pero el príncipe está protegido por la pluma del pájaro de fuego y Kostchei es impotente para encantarle. Iván llama en su ayuda al pájaro de fuego. Una irresistible avalancha de plumas del pájaro obliga a Kostchei y sus súbditos a danzar frenéticamente hasta caer exhaustos. Entonces el pájaro los adormece con una canción de cuna.
Iván entra al castillo y vuelve con un huevo que contiene el espíritu del mago. Estrellándolo en el suelo destroza para siempre el poder de Kostchei. El final es el desfile nupcial de Iván y la princesa.
Esta obra será proyectada con el Ballet y Orquesta Sinfónica del Teatro Mariinsky de San Petersburgo, Rusia, (en la era soviética, Leningrado), dirigida por el maestro Valery Gergiev, el día miércoles 18 de agosto en el Paraninfo Universitario, 2a. Av. 12-40 zona 1, a las 18:15 horas. Actividad que se desarrolla dentro del Festival del Centro Histórico del año 2010.
Previa presentación y explicación del Maestro Jorge Sarmientos.
Al final: Preguntas, comentarios y café.