Rodolfo Ibarra, Comunicador, vinculado con los supuestos autores intelectuales del asesinato de Rodrigo Rosenberg y supuesto artífice de la campaña de desprestigio en contra de la CICIG, apeló la resolución que ordenó prisión preventiva en su contra.
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La apelación fue presentada ante el Juzgado Décimo de Primera Instancia donde se tramite el proceso en su contra por colusión, conspiración para la colusión y obstrucción a la justicia.
Verónica Galicia, contralora del proceso informó que esa judicatura está preparando el expediente para elevarlo a la Sala Primera de Apelaciones, la cual resolverá la acción de Ibarra, quien busca salir de la prisión.
Por aparte, Juan Antonio Fuxet, auditor de la empresa Lanquetín, S.A., propiedad de los hermanos Francisco y Estuardo Valdés Paiz, supuestos autores intelectuales del asesinato del jurista, solicitó una copia «completa» del expediente que se tramita por ese crimen.
Galicia indicó que esa judicatura había resuelto la entrega parcial del expediente por considerar que al sindicado «no le interesa lo que se ha recabado respecto a ese crimen, indicó.
«Sólo accedí a entregarle una copia del expediente a partir de la primera imputación que se hizo en contra del señor Fuxet, no así toda la imputación del caso Rosenberg», detalló Galicia.
Tanto Fuxet como Ibarra permanecen en prisión por sus vínculos con los Valdés Paiz, prófugos de la justicia desde diciembre último.
La fiscalía especial del Ministerio Público para Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala presentó una serie de evidencias documentales y llamadas telefónicas que los vinculan con los prófugos y a una campaña de desprestigio contra de la CICIG.