Huelguistas heridos en China


Aproximadamente 2 mil trabajadores se enfrentan con la Policí­a en China. CHINA OUT AFP PHOTO

Decenas de trabajadores en huelga resultaron heridos esta semana en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad en China, en uno de los últimos episodios de protesta social que golpean al paí­s comunista, convertido en las últimas décadas en el «taller del mundo».


Los enfrentamientos del lunes en la empresa de caucho de capital taiwanés KOK en la provincia de Jiangsu, en el este, coinciden con un movimiento de protesta en algunas fábricas de la japonesa Honda y ocurren tras una oleada de suicidios en la empresa tecnológica taiwanesa Foxconn.

Estas acciones ponen de manifiesto el creciente malestar ante las difí­ciles condiciones laborales y los bajos salarios que según los activistas sufren millones de obreros.

En el caso de la fábrica KOK, en la ciudad de Kunshan, en las afueras de Shanghai, unos 2.000 trabajadores se declararon en huelga para reclamar un aumento salarial y una mejora de las condiciones laborales, según informó el miércoles el diario oficial en lengua inglesa China Daily.

Los enfrentamientos estallaron cuando los operarios trataron de salir a la calle a protestar, añadió el rotativo.

Las fotografí­as del incidente mostraban a la policí­a y a fuerzas especiales impidiendo a los huelguistas salir de la fábrica.

Según el diario, 50 trabajadores resultaron heridos, cinco de ellos de gravedad.

Los responsables de la fábrica, contactados el miércoles por la AFP, se negaron a comentar la huelga pero señalaron que los empleados habí­an retomado el trabajo.

«Trabajamos con temperaturas de 40 a 50 grados Celsius. Se niegan a hacer nada para remediarlo», dijo un trabajador al diario South CHina Morning Post, basado en Hong-Kong.

Geoff Crothall, del China Labour Bulletin basado en Hong Kong, vinculó el incremento de las protestas laborales con la recuperación general de la economí­a. Según él, los trabajadores están cada vez menos dispuestos a aceptar bajos salarios y hacer largas jornadas laborales, a medida que mejora la economí­a.

«Nos enfrentamos en los últimos años, especialmente desde la ley de contrato de 2008, a unos trabajadores más conscientes de sus derechos y más proclives a defenderlos», dijo Crothall a la AFP.

«Los trabajadores sólo quieren trabajar en un sitio que no sea tan opresivo y sea decente», añadió.

Los casos siguen sin embargo muy concentrados en empresas extranjeras.

La taiwanesa Foxconn, que cuenta con Apple, Sony y Hewlett-Packard entre sus clientes, ha aceptado aumentar en un 67% los salarios -hasta los 2.000 yuanes (245 euros o 300 dólares) de media- a sus cientos de miles de trabajadores en China, tras el suicidio de 11 de sus empleados, 10 de ellos en la ciudad sureña de Shenzhen.

En paralelo, las fábricas de ensamblaje del segundo mayor fabricante automotor japonés, Honda, estuvieron paralizadas durante más de una semana, hasta el pasado sábado, por una huelga en el seno de su fábrica de repuestos.

Apenas resuelto el conflicto con un aumento salarial del 24%, una nueva huelga estalló el lunes en una coempresa establecida por una filial de Honda en Foshan (sur).

Este miércoles, Honda indicó que dos de sus plantas de ensamblaje en China seguí­an cerradas debido al movimiento social, contradiciendo una información de la agencia de prensa oficial China Nueva. Una tercera planta, dedicada a la fabricación de piezas, se veí­a también afectada este miércoles por una huelga.

Honda fabrica unos 650.000 vehí­culos anuales en China.

Por último, los medios de Taiwán informan sobre otra huelga reciente en un fabricante taiwanés de componentes para teléfonos, Merry Electronics, a la que puso fin rápidamente aumentando los salarios en su fábrica de Shenzhen (Guangdong) en un 16,7%.