Los comentarios sobre la salud física de la cantante Alejandra Guzmán, quien fue hospitalizada, están escalando muy alto; en un programa se dijo que la cantante tenía un angiolipoma en la espalda, versión que nadie la cree.
Más bien se están inclinando a lo que dijo una periodista en México. Según ella, la cantante fue inyectada con una substancia tóxica en los glúteos y todo se complicó.
Alejandra había sido paciente de Valentina de Albornoz, «una señora que inyecta a las estrellas y que hace algún tiempo le hizo un mal trabajo facial; no sé por qué regresó a realizarse otra cirugía con ella», dijo la periodista.
La sustancia química que supuestamente le inyectaron a la «Reina de Corazones» en los glúteos, le infectó la sangre y los huesos. Al notar la infección, Alejandra fue trasladada a Estados Unidos, donde no la quisieron atender debido a la gravedad de su padecimiento, dijo la fuente.
Viendo el rechazo, no le quedó más a la Reina del Rock que pedirle al Dr. Raúl López Infante -famoso por ser el cirujano plástico de Belinda- para que le ayude a tratarle la infección, según la periodista.
Debido a esa mala práctica, la rockera no la está pasando muy bien.