Hito?


Cosa o hecho clave y fundamental dentro de un ámbito o contexto; nuevo año, nueva oportunidad. Se fue el 2006, año de saqueos y robos a diestra y siniestra, vino el 2007 como la piedra angular de la oportunidad, para salir de las malversaciones, robos y contrabandos.

Carlos Asturias

¿Esperaremos más? ¿O no estamos prestos a cambiar la forma de desgobernar a que nos sometieron durante este y otros gobiernos anteriores, patrones generales de los mismos para lo mismo?

Como bien lo define La Hora en sus ochenta y siete años de existencia: «Foro, no Mostrador»; tal y como nuestra nación debe considerarse, un foro de probos ciudadanos y no el mostrador de regateos, como en cualquier plaza pública suele suceder. Que siendo el medio escrito de una familia en lí­nea directa de su fundador, ha seguido conservando las metas de su fundación.

A trasluz están presentes las figuras que podrí­an hacer cambios en nuestro gobernar, sentando bases de realidades urgentes y necesarias, considerando por supuesto que los cambios comprenden infraestructura, sin la cual y solo en leyes escritas, volverí­amos a caer al mismo despeñadero. El Congreso debiese ser la representación de los valores éticos y morales de los municipios, no el representante del poder económico corrupto del narcotráfico y contrabando, designado al dedo por el gobernante en turno, encargado de manipular los deseos cí­vicos, convirtiéndolos en intereses personales y de grupo.

El dormido interés de los guatemaltecos principia a despertar y es de esperarse llegar a una segunda vuelta con caras nuevas y de reconocido prestigio nacional. Esos grupos ya formados, se encuentran reunidos alrededor de una figura, sin carisma pero con dinero generalmente mal habido; nuevos secretarios generales deben aparecer. No es posible hablar de cambios si son los mismos tras lo mismo.

Tener presente y considerar que todo lo que se pueda hacer durante el primer año de gobierno marcará el hito de lo que nos espera; a partir de ahí­ y solo que se haya encontrado la fórmula de beneficiar a las grandes mayorí­as, con beneficios colectivos, será un gobierno tan lleno de traspiés y trompicones. No combinar gobierno con polí­ticos de fachada es la clave, gente nueva con pleno amor patrio.

Reconocer, como constantemente se hace en las publicaciones escritas y unas de radiodifusión, sobre la labor desarrollada por los médicos cubanos, es parte de un reconocimiento a lo que sí­ nos fortalece; sin pensar nunca en que la ideologí­a polí­tica es la causa, eso es harina de otro costal y a su debido tiempo se discutirá, en el lapso de estas próximas elecciones, que pintan muy atractivas y muy duras.

Cada región del paí­s está sujeta a sus propias normas y herencias familiares, el ejemplo lo palpé en mi viaje a Villa Canales a celebrar el Año Nuevo, mientras los vecinos ya se acostumbraron al constante tambalear, al retumbo y la erupción. Debido a las erupciones del volcán de Pacaya continúan con su cotidiano vivir, cual si nada sucediera, o que a los habitantes de Tectitán les asombrara ver las plantaciones de amapola en su alrededor, y de las cuales solo la autoridad pareciera no darse cuenta, o El Naranjo en Petén con ese volumétrico contrabando de México hacia Petén ente los cegatones representantes de la seguridad del paí­s y la soberaní­a del mismo, o peor aún, volver a inaugurar el asfalto de la carretera al norte de Huehuetenango, ya es la quinta vez.