La aventura laboral que finaliza este año estuvo marcada por importantes sucesos que han escrito parte de la historia, y sirven además para esbozar parte del futuro de la sociedad guatemalteca. La experiencia de los casi 12 meses de labor ha dejado intimar con sucesos relevantes, los cuales he redactado para el amable lector que deposita en nosotros la confianza de informarse. Las peripecias vividas para lograr ese objetivo han sido muchas y diversas, desde correr detrás de un funcionario que se niega a dar declaraciones, recibir algunos empujones de elementos de seguridad que se anteponen entre la grabadora y la información, esperar largo tiempo por algún funcionario público o el desden de quien nos cuelga el teléfono al ser consultado, son sólo algunos ejemplos.
No obstante, aún con todas las situaciones desagradable que esta ocupación requiere, la experiencia no pudo haber sido mejor, ser parte del proceso electoral, el cual finalizó con la elección del próximo presidente de la República, ha sido por su importancia futura, el acontecimiento de mayor relevancia en el quehacer periodístico; el cual se vivió desde el momento de su convocatoria hasta la lectura de resultados parciales ofrecidos por las autoridades electorales, todo un proceso en el que desempeñamos el papel de seguidores y en muchos casos provocadores de la noticia.
La visita del presidente de Estados Unidos George W. Bush fue otro elemento importante, coincidir con la visita del mandatario de la nación más poderosa del mundo fue una experiencia profesional interesante; como lo fueron otros sucesos que horas más tarde se volvieron noticia en las páginas de este vespertino, en el cual nos encargamos en la ocupación de informar.