Los jugadores del Heat de Miami acababan de mirar el Super Bowl cuando Shane Battier dio un discurso que dejó una impresión tremenda.
Lo que sea que haya dicho esa noche en Toronto, el Heat claramente despegó a partir de ahí, y no ha aterrizado todavía.
LeBron James y Chris Bosh anotaron cada uno 28 puntos y el Heat logró su 21era victoria consecutiva al derrotar ayer por 107-94 a los Bucks de Milwaukee.
Bosh anotó desde todos los ángulos y acertó 12 de 16 tiros de campo, con dos canastas de tres unidades. Incluso logró una jugada de cuatro puntos que dejó la pizarra en 67-53 cuando habían transcurrido unos cinco minutos del tercer cuarto.
Sólo otros tres equipos más han ganado 20 partidos al hilo en una temporada y ahora el Heat está detrás únicamente de los Lakers de Los Ángeles de la temporada 1971-1972, que vencieron en 33 partidos seguidos, y de los Rockets de Houston de 2007-2008, que ganaron 22.
El Heat superó el viernes en este rubro a los Bucks, que ganaron 20 encuentros consecutivos en la campaña 1970-1971.
«Pienso que lo más grande para nuestro equipo fue mirar el Super Bowl y alejarnos del basquetbol en un sentido y simplemente disfrutar unos con otros», comentó Dwyane Wade. «Recibimos el famoso discurso de Shane Battier y hemos estado arrollando desde entonces», señaló.