Guatemala y Grecia, el problema común de la deuda


Pedir dinero prestado -en tiempo de desaceleración- nunca es un buen negocio, sobre todo cuando los intereses son extremadamente altos y el costo social puede acarrear problemas serios para la población. Guatemala y Grecia, cada paí­s por su lado, tienen culturas milenarias y tradiciones bien arraigadas en sus habitantes, y ahora la «deuda» podrí­a ser el tercer factor común, pero éste no es tan bueno como los otros dos.

Redacción La Hora
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Grecia, uno de los 27 paí­ses de la Unión Europea, recién acaba de superar la primera fase de la crisis económica que sufrió por causa de la deuda pública y luego de la experiencia, el Fondo Monetario Internacional (FMI) emitió una serie de recomendaciones para evitar se suceda lo mismo en paí­ses de América Latina.

La responsabilidad del uso de la polí­tica fiscal resulta ser un factor importante para evitar que se produzcan crisis económicas, según lo ha mantenido el Fondo Monetario Internacional consistentemente desde su creación en 1944.

La crisis económica que actualmente viven Grecia y los paí­ses del Mediterráneo europeo le podrí­an dar la razón y el Fondo comienza a girar advertencias a otros paí­ses para que rectifiquen el rumbo de sus cuentas fiscales. Esas advertencias han alcanzado recientemente a Guatemala.

Varios medios de comunicación transmitieron la preocupación del FMI que recomendó a los paí­ses de América Latina y el Caribe aprovechar «la transitoria bonanza» que tendrá la región en los próximos años para afianzar su futuro y prepararse lo mejor posible para los problemas comerciales que se avecinan.

CRISIS

Algunos analistas guatemaltecos han expresado, en entrevistas y blogs de análisis, que la crisis helénica debe ser una lección para tomar muy en serio por naciones como la guatemalteca, pues un manejo inadecuado del nivel de deuda pública podrí­a poner en aprietos al paí­s en un futuro no muy lejano.

¿La crisis está a la vuelta de la esquina? Expertos advierten que hay que estar prevenidos, mientras las autoridades aseguran que no hay porqué preocuparse, sin embargo el FMI mostró su preocupación por el gasto del presupuesto en los gobiernos.

Hay que evidenciar dos procesos que pudieran ser comparativos entre ambas sociedades, tanto Grecia como los paí­ses de la región centroamericana; en el caso de Grecia es de los estados débiles de la Unión Europea y de los estados débiles con menor nivel de institucionalidad y menor capacidad de enfrentar una crisis económica, comentan los expertos en el tema.

Además señalan que en la región centroamericana es una debilidad crónica la que se manifiesta en forma en que se afrontan las circunstancias financieras y para el caso guatemalteco existe un problema de obtención de fondos por medio de una reforma fiscal integral.

Para Jorge Santos del Centro Internacional para Investigaciones en Derechos Humanos, dadas las circunstancias se crea la solución, que según el FMI es la reducción del gasto público, sin embargo esto provoca que la crisis se profundice y con la contención del gasto público en Grecia hubo un recorte de los gastos que afectó a la clase trabajadora.

En el caso de sociedades tan débiles como la guatemalteca, el hecho de reducir el gasto público puede provocar una caí­da en la actividad económica y un ciclo de desempleo que profundiza la situación, afirmó el entrevistado.

Con un recorte presupuestario en el gasto social las poblaciones son las más afectadas y los más vulnerables, señaló Santos, quien cree que hay que hacer todos los esfuerzos necesarios para la implementación de una reforma integral para dotar al estado de recursos y así­ mantener los ingresos que se utilizarán en el servicio público.

Aunque podrí­an ir en contra de las polí­ticas del FMI, Santos propone aumentar el techo presupuestario, pero también seguir promoviendo la reforma fiscal y una ley antievasión porque juntos pudieran reactivar la economí­a del paí­s.

FINANZAS

El Ministerio de Finanzas Públicas prevé un crecimiento de la economí­a, medido a través del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), que se estima en un 2.7 por ciento para el año 2011. Aunque, la paralización del comercio como producto de la tormenta tropical Agatha podrí­a reducir los niveles de crecimiento para este año se esperaba mantener la producción en 2.1 por ciento.

Sin embargo el crecimiento de la recaudación fiscal prevista por Finanzas Públicas es decreciente para los siguientes años, pero se estima en promedio en los siguientes tres años se mantenga en 10.4 por ciento, con respecto a los impuestos recaudados.

El déficit fiscal se mantiene en 3.2 por ciento, aunque lo recomendado por el FMI es del 3 por ciento, las autoridades aseguran que no hay ningún problema y las expectativas es que llegue a sus niveles normales.

Según información proporcionada por el ministro de Finanzas, Juan Alberto Fuentes Knight, en el marco de implementación de una polí­tica fiscal prudente y ante un escenario de recaudación modesto a mediano plazo, se inició en 2010 una reducción gradual del déficit fiscal estimando un déficit máximo de 3.1 por ciento del PIB.

Sin embargo el presupuesto aumenta cada año, para el 2011 es de Q51 mil 701.8 millones y para el 2012 será de 54 mil 373 millones, además se prevé para el 2013 un presupuesto de 57 mil 092.9 millones. A pesar de incrementarse cada vez más, en contra de lo recomendado por el FMI, Fuentes Knight manifestó que es al contrario, es menor porque hay que calcular el crecimiento demográfico.