El Gobierno de Guatemala no se ha pronunciado por las denuncias de espionaje supuestamente realizadas por la Agencia Nacional de Seguridad de Estados Unidos (NSA, en inglés). El embajador boliviano ante las Naciones Unidas, Sacha Llorenti, denunció que esa instancia vigiló también las comunicaciones de Bolivia y varias ciudades latinoamericanas, incluyendo a Guatemala.
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El espionaje a las comunicaciones de mandatarios extranjeros y millones de ciudadanos en todo el mundo salió a luz por el extécnico de la NSA, Edward Snowden, quien informó sobre esta práctica del Gobierno estadounidense.
De esa cuenta, el Embajador boliviano en su reciente denuncia dijo que la NSA llevó a cabo una vigilancia electrónica en ciudades y países latinoamericanos como Brasilia, Bogotá, Caracas, Mérida y Quito. Además de Guadalajara, Ciudad de Guatemala, La Habana, Managua, Ciudad de México, Ciudad de Panamá, San José y Tegucigalpa.
El Gobierno de Guatemala no ha emitido pronunciamientos al respecto, pese al señalamiento directo.
Además, La Hora realizó varias llamadas al canciller Fernando Carrera, quien se encuentra en Londres, pero no se pudo establecer contacto y de igual forma se trató de localizar al vicecanciller Carlos Raúl Morales, pero se informó que se encontraba en una reunión y que al terminar daría declaraciones al respecto.
Sin embargo, al cierre de esta edición no se contó con ninguna comunicación de parte de la diplomacia guatemalteca.
NO HABRÁ PRONUNCIAMIENTO
Según el excanciller Gabriel Orellana, el Gobierno de los Estados Unidos tiene una “paranoia” por lo que espían a quienes ellos quieren. “Esto sucede porque muchas personas lucran con esta situación, les pitan cualquier chaleco y ellos lo compran porque sencillamente es parte de su sistema”, señala.
Orellana indica que es lógico pensar que se justifica porque los Estados Unidos quiere tener a sus aliados en orden y “supuestamente con eso nos hacen creer que con eso nos están defendiendo del terrorismo internacional”.
Además, señala que con solo el hecho de tener alineado al Presidente o a cualquier figura que se pueda salir del control, para Estados Unidos es justificable el realizar este tipo de vigilancia.
El exdiplomático considera que con ese espionaje no necesitan llegar a los extremos que han llegado de sofisticación electrónica. “En Guatemala tenemos que reconocer que hay gente de altos niveles en el Organismo Legislativo, Ejecutivo y Judicial, que tienen más miedo que vergüenza”, por lo que perder para ellos una visa ya los hace colaboradores eficaces de los Estados Unidos, señala Orellana.
Además, indica que ningún gobernante de Guatemala tiene los arrestos para realizar una denuncia formal ante este hecho, por lo que se duda que se haga una pronunciación al respecto.
Los Gobiernos de México, España, Brasil y Alemania han levantado la voz ante los señalamientos de espionaje de parte de la NSA en sus respectivos países.