Tras el triunfo de Barack Obama, asociaciones de migrantes ven un panorama no tan complicado, a diferencia de si hubiera ganado Mitt Romney, teniendo muchas expectativas pero con ciertas precauciones. Elizabel Enríquez, de la Mesa Nacional para las Migraciones en Guatemala (Menamig), indica que la reelección de Obama representa una segunda oportunidad para cumplir con los ofrecimientos de reforma migratoria.
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Enríquez indica que es bastante complicado que vaya a pasar una reforma migratoria integral, del modo en la que se había planteado. “Quizá pase una reforma con muchas restricciones”, pero este será un trabajo que tanto las organizaciones de migrantes como autoridades de los distintos países tendrán que ver.
Además dice para que esta reforma pueda ser realidad se tendrá que hacer un trabajo de cabildeo e incidencia de organizaciones que abordan el tema migratorio, así como de los gobiernos de la región, esto con el objetivo de presentar una propuesta en bloque en favor de sus connacionales, para mover la voluntad política del Gobierno estadounidense.
En otro tema importante para Guatemala como el Estatus Temporal Migratorio (TPS), Enríquez señala que es un tema muchísimo más complicado en la situación actual en la que se encuentra Guatemala.
“Es difícil que se pueda otorgar un TPS, primero porque este estatus se otorga cuando un país o un estado ha sufrido una situación de catástrofe muy fuerte, y en este caso la propuesta presentada fue luego de la tormenta Agatha y la erupción en mayo del volcán Pacaya en el 2010, y a estas alturas llevamos ya casi dos años”.
Expone que Guatemala debe de cambiar la estrategia en vez de estar gastando energía y estar insistiendo en el TPS cuando no están las condiciones para que esta pueda ser otorgado, entonces deberán de plantear otras propuestas que beneficien de manera más directa a los guatemaltecos en Estados Unidos.
Entre tanto, Carlos Gómez, del Movimiento de Migrantes Guatemaltecos en Estados Unidos, indica que con la reelección de Obama existe una esperanza que de alguna manera se ve favorecida para la comunidad latina, puesto que el candidato republicano había levantado varios temores, debido a la campaña que realizara, al hablar mucho de deportaciones.
Gómez indica que el tema de la reforma migratoria se ve cuesta arriba, ya que esta deberá de pasar por el Congreso y el Senado y estos dos no se modificaron en casi nada, debido a que los cambios que hubo dentro del Congreso fueron no sustantivos y el control de la Cámara lo siguen manteniendo los republicanos; es en ese sentido que la reforma migratoria se ve cuesta arriba.
Además coincide con Enríquez al indicar que serán las asociaciones latinoamericanas las que harán alianzas para impulsar la reforma migratoria, pero que no solo será de parte de las asociaciones sino también de los gobiernos, a fin que se involucren en este esfuerzo para apoyar las decisiones de sus connacionales y hacer los gobiernos algo importante que pudiera ayudar a tener una reforma migratoria.
Gómez indica que este esfuerzo debe de realizarse a partir del próximo año, y lograr que se integre una reforma migratoria integral. Además señaló que en lo que se refiere al TPS es un tema cerrado en los Estados Unidos, y que, aunque el Gobierno de Guatemala insista, es algo que para el país no se logrará.