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Después de un juicio que se prolongó cinco meses, una corte de Atenas encontró que Akis Tsochadzopoulos, una importante figura en gobiernos socialistas previos, fue culpable de los cargos imputados, junto con 16 de sus 18 coacusados, incluida su esposa, ex esposa e hija.

El ex ministro de 73 años había negado todos los cargos en su contra y acusó a la fiscalía de realizar un juicio con motivaciones políticas.

La esposa de Tsochadzopoulos y su hija recibieron sentencias de 12 años de cárcel, mientras que para su ex esposa y primo el castigo fue de seis años. Los otros acusados recibieron sentencias de entre seis y 16 años de prisión.

Once de los acusados —pero no Tsochadzopoulos, su esposa e hija— fueron dejados en libertad al estar en espera su audiencia de apelación.

En marzo, una corte sentenció a Tsochadzopoulos a ocho años de cárcel por presentar declaraciones de ingresos falsas. Además ordenó el decomiso de su casa ubicada en el centro de Atenas y le impuso una multa de 520.000 euros (706.800 dólares).

Él había pasado casi un año y medio en detención previa al juicio, al igual que su esposa, hija y otros cómplices cercanos.

El juicio por corrupción se originó de un escándalo sobre contratos de compra de submarinos alemanas y misiles antiaéreos rusos. Tsochadzopoulos había sido acusado de recibir sobornos entre 1997 y 2001 para otorgar los contratos.

Aunque los cargos por cohecho están más allá de un estatuto de limitaciones para un ex ministro, él fue declarado culpable de lavado de dinero por utilizar las ganancias del presunto soborno.

Tsochadzopoulos fue ministro de Defensa de Grecia de 1996 a 2001 y ministro de Desarrollo entre 2001 y 2004. Fue un miembro prominente de partido socialista PASOK, el cual dominó la política griega durante la mayor parte de las últimas tres décadas.