El presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, cumplió este jueves sus primeros 100 días al frente del gobierno fustigando a la oposición socialdemócrata, a la que acusó de «burlarse del pueblo» y de entregarle un país «descascarillado».
El mandatario derechista, dueño de una cadena de supermercados, expresó que en 100 días «no se hace magia», pero afirmó que el cambio que prometió en la campaña electoral «va por buen camino».
«Lo que hay aquí es una oposición que se robó este país y cuando quieran con mucho gusto vamos a empezar a destapar todos los escándalos porque este país no aguanta más», dijo Martinelli a los periodistas, aludiendo al gobierno anterior del socialdemócrata Martín Torrijos (2004-2009).
«Los que estuvieron en el pasado y que ahora son los mayores criticones de todo lo que pasa (…) nos han dejado descascarillado este gobierno y han acabado con todo. No se llevaron las garzas porque eran muy chillonas», dijo Martinelli refiriéndose a las aves que habitan en el Palacio Presidencial.
Martinelli es el cuarto presidente de América Latina con mayor aceptación con un 77%, por detrás de Mauricio Funes de El Salvador (84%), Luiz Inázio Lula Da Silva de Brasil (81%) y Michelle Bachelet de Chile (78%), según un informe de la Consultora Mitofsky, una firma mexicana.
La oposición le reprocha que está despidiendo masivamente a funcionarios públicos; que no ha bajado los índices de criminalidad ni el costo de la vida como lo prometió; que ha adjudicado contratos en forma directa por 150 millones de dólares y la permanente descalificación a sus críticos.