El presidente palestino Mahmud Abas debía tratar hoy junto al primer ministro Ismail Haniyeh de superar las divergencias de último momento que podrían retardar la instalación de un gobierno de unión entre los dos movimientos rivales, el Fatah y el Hamas.
«El presidente Abas y una delegación del Fatah irán a Gaza para reunirse con Haniyeh y el Hamas con miras a iniciar el proceso constitucional para la formación de un gabinete de unión», declaró Azzam Al-Ahmad, jefe del grupo parlamentario del Fatah.
Pero «comienzan a aparecer obstáculos y trataremos de eliminarlos para formar el gabinete lo más rápidamente posible», agregó.
Inicialmente, Abas, el jefe del Fatah con sede en Ramalá en Cisjordania, debía encargar el jueves a Haniyeh que formara el gobierno después de un discurso dirigido a los palestinos, pero esta alocución fue postergada indefinidamente luego de un desacuerdo con el Hamas.
Según el entorno del presidente de la Autoridad palestina, el gobierno de Hamas exige antes de dimitir que Abas confirme nombramientos de altos funcionarios y que acepte el candidato elegido por el Hamas para el cargo clave de ministro del Interior.
También se supo que aparecieron divergencias sobre la repartición de las carteras ministeriales.
El 8 de febrero, durante una reunión de reconciliación en La Meca (Arabia Saudí), Abas y el número uno del Hamas, Jaled Mechaal se habían puesto de acuerdo para la instalación de un gobierno de unión, después de la crisis política que había degenerado en sangrientos combates entre los dos grupos en la franja de Gaza.
Según los términos del acuerdo, el Hamas debe disponer, además de Haniyeh, de nueve ministros en el gobierno, contra seis para el Fatah. Los puestos claves de Relaciones Exteriores y de Finanzas deben quedar en manos de independientes mientras que el del Interior debería corresponder a una personalidad independiente elegida por el Hamas con el acuerdo del Fatah.
Existe desacuerdo sobre el candidato eventual para Relaciones Exteriores, Ziad Abu Amr. El Hamas estima que debe formar parte de los seis ministros del Fatah, mientras que éste último estima que Abú Amr es un independiente allegado al Hamas.
El Hamas, que controla el gobierno desde marzo del 2006 después de su victoria electoral, trató de restar importancia a estas divergencias, afirmando que no ponía condiciones sino que deseaba «tener más conversaciones» con Abas.
«No hay divergencias ni condiciones planteadas por el Hamas. Se trata simplemente de cuestiones que necesitan un acuerdo», afirmó el portavoz del Hamas, Fawzi Barhoum.
El miércoles, el portavoz de la presidencia Nabil Abú Rudeina había rechazado «toda nueva condición» para la aplicación del acuerdo de La Meca.
El gobierno surgido del Hamas, considerado como una organización terrorista por Estados Unidos y Europa, se encuentra paralizado por un boicot diplomático y financiero occidental y debió enfrentar una crisis política interna sin precedentes frente al Fatah.
Los acuerdos de La Meca estipulan que el nuevo gobierno se comprometerá a «respetar» los acuerdos concluidos por la Organización del liberación de la Palestina (OLP), incluyendo los firmados con Israel, lo que significa un reconocimiento implícito del Estado hebreo.
Estados Unidos y Europa exigen que el Hamas reconozca explícitamente a Israel, los acuerdos concluidos y que renuncie a la violencia.
El «Cuarteto de Madrid» (EE.UU., la ONU, la UE y Rusia) para la paz en Oriente Medio se reunirá el próximo miércoles en Berlín para analizar el acuerdo alcanzado entre las dos principales facciones palestinas, Hamas y Al Fatah, para la formación de un gobierno de unidad nacional.
El Ministerio alemán de Asuntos Exteriores confirmó hoy esa información, avanzada ya en días pasados por los Gobiernos de Washington y Moscú.
Al margen de la reunión, el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, celebrará una serie de reuniones bilaterales con los participantes.
En una primera reacción al compromiso suscrito el pasado jueves en La Meca (Arabia Saudí), el grupo mediador había reafirmado la declaración final del anterior encuentro ministerial, celebrado el 2 de febrero pasado en Washington.
En el documento el Cuarteto expresaba su apoyo a un gobierno palestino «comprometido con la no violencia, el reconocimiento de Israel y la aceptación de acuerdos y obligaciones previas, incluida la Hoja de Ruta».