Gobierno carece de plan para la distribución de vacunas contra gripe A


La gripe AH1N1 golpeó a todo el mundo a mediados del año pasado, pero se prevé que pueda haber un rebrote en estas épocas de frí­o. FOTO LA HORA: ARCHIVO

El plan de prevención ante un posible nuevo brote de gripe A aún no ha sido presentado por la entidad responsable, esto, a pocos dí­as de recibir una dotación de medicamentos que evitan el contagio de la enfermedad.

Andrea Orozco
aorozco@lahora.com.gt

Se espera que a finales de este mes, la Organización Panamericana de la Salud, (OPS), inicie con la distribución de las vacunas contra la gripe AH1N1, sin embargo, aún no se cuenta con un plan especí­fico por parte del Ministerio de Salud para ello.

Según indicó el vicepresidente Rafael Espada, el Centro de Control Epidemiológico de la cartera de salud aún no ha presentado un plan para la distribución de las vacunas para prevención que serán donadas por la República de Taiwán y trasladadas al paí­s por la OPS, ya que se encuentra a la espera de las indicaciones de dicha entidad.

Para evitar un nuevo brote de la enfermedad, se estima que medio millón de dosis del medicamento contra la gripe A sean aplicadas a médicos y personas en alto riesgo, entre ellos niños y adultos mayores, pero a decir del vicemandatario, hasta el momento no se le ha presentado la estrategia de distribución por lo que durante esta semana se sostendrá una reunión con el titular de dicho ministerio, Ludwig Ovalle.

Espada también indicó que la vacunación se hará a finales de enero, ya que por el momento no se ha presentado gran cantidad de casos de contagio, por lo que la OPS no creyó conveniente iniciar con la distribución antes de esa fecha.

Enfermedad benigna

Aunque las cifras de fallecidos y afectados por esta epidemia durante 2009 aún no se han hecho públicas, para el vicegobernante la epidemia que se dio a nivel mundial es benigna, ya que según indica «hay más muertos por la gripe común y por sida, que por la AH1N1», por lo que considera la reacción que se dio como «exagerada».

«Es una enfermedad totalmente curable y tratable», dice Espada, además de indicar que se debió realizar un plan epidemiológico para tratarla, sin embargo, a decir del vicepresidente, esto no fue posible debido a que los paí­ses no estaban preparados para este virus nuevo.

Por otro lado, el vicemandatario considera que el número de contagiados durante esta epidemia fue relativamente bajo comparando las cifras con otros paí­ses como México en donde se presentó gran cantidad de muertos por esta enfermedad.