La galería La Antigua de la ciudad colonial es el escenario donde concluirá la muestra itinerante de escultura y pintura titulada “Al arte tiempo” de Mario García, Mauro López y Flavio Santa Cruz, que durante el 2012 recorrió las diferentes escuelas de arte donde se formaron como artistas y las galerías en las cuales iniciaron su carrera profesional al inicio de los años 90.
La exposición, que se ha venido renovando en cada estación y que incluye obras antiguas y recientes, será inaugurada mañana sábado a las 16:00 horas en la mencionada galería.
Además de celebrar y documentar dos décadas de vida artística profesional, la exposición itinerante “Al arte tiempo” comparte sus propósitos didácticos y culturales con el reclamo de legitimidad histórica para una generación de artistas que ha sabido reflejar en sus obras, desde una perspectiva existencial muy particular, las cambiantes circunstancias económicas, sociales y políticas en que ha desarrollado su trabajo creativo.
Tales circunstancias externas y tal perspectiva existencial se refieren al hecho de que estos artistas nacieron y se formaron bajo el signo de la guerra, la cual, para finales de los años 80, cuando ellos empiezan a surgir como artistas, había perdido el sentido revolucionario que encendió a las anteriores generaciones de artistas, dejando en los jóvenes un desencanto muy profundo con relación a la expresión artística de los temas sociales y de las intenciones documentales y de denuncia de las atrocidades del conflicto.
Así, desde ese desencanto en la base de su actitud artística, Mario García buscó desde sus inicios la reintegración de la vida humana en un equilibrio clásico que no lo encuentra, sin embargo, en las rutinas académicas sino en la idealizada plenitud de la ciudad de Antigua, apenas entrevista en los reflejos del agua, en la solemnidad ritual y poderosa de las mujeres, en la luz conventual de un farol ferviente, en el volcán inamovible por el que baja el cielo.
La evolución de la obra de Mauro López acompaña, en lo temático, el proceso que va del abandono de los campos de labranza convertidos por la lógica realista de la guerra en campos de batalla hasta el retorno de la imaginación y la poesía, desterrados por muchos años de los procesos de creación artística, y mientras que en el aspecto emotivo documenta el agotamiento del tema revolucionario y el redescubrimiento de la vida interior como fuente del trabajo artístico.
La obra de Flavio Santa Cruz, por aparte, surge del trabajo en el taller, ajeno a las ideas políticas y estéticas que predominaban en el medio, y también de una especie de inspiración al revés: no de místicos estados de gracia, de intuiciones de serenas armonías formales ni de sofisticadas teorías artísticas sino más bien de vivencias tumultuosas y perturbadoras que se dan en el contexto de su cotidianidad social y cultural.
Como se puede ver, las vinculaciones de estos artistas con su medio social y su contexto histórico son muy complejas y de allí que juzgar su trabajo como evasivo no sólo es infundado sino además es dogmático, en el peor sentido del término. De allí también el sentido de que esta exposición conmemorativa revisitara las escuelas y galerías donde surgieron y dieron sus primeros pasos estos artistas, y mostrara y reclamara en diversos escenarios su representatividad como generación en el devenir del arte guatemalteco.
“Al arte tiempo” permanecerá abierta al público hasta el 5 de marzo y puede ser visitada de martes a domingo en galería de arte La Antigua: 4ª. Calle Oriente No. 15, Antigua Guatemala.