La decisión de Argentina de otorgarle refugio a un ex guerrillero chileno acusado del homicidio de un senador en su país en 1991 provoca fricciones entre los dos gobiernos, en un momento en que las relaciones bilaterales pasan por un buen momento.
La decisión de Argentina de otorgarle refugio a un ex guerrillero chileno acusado del homicidio de un senador en su país en 1991 provoca fricciones entre los dos gobiernos, en un momento en que las relaciones bilaterales pasan por un buen momento.