La prohibición de fumar en empresas, escuelas y administraciones entró en vigencia este jueves en Francia, primera etapa hacia una prohibición total en los lugares públicos que se extenderá luego a los bares y restaurantes.
A partir de este 1 de febrero no se podrá fumar en centros educativos, comercios, estaciones de tren, aeropuertos, empresas, salas de deporte, salas de espectáculo o en ningún transporte colectivo de Francia.
Los cafés, restaurantes, casinos o discotecas dispondrán de un plazo suplementario de once meses, es decir, hasta enero de 2008.
En Francia, el ministro de la Salud, Xavier Bertrand, se declaró «muy confiado» en en que los responsables de las empresas, escuelas u hospitales harán que esta norma, introducida por decreto, sea respetada.
De esta forma, Francia entrará a formar parte del pequeño grupo de países europeos con leyes antitabaco.
El martes, la Comisión europea se pronunció el martes a favor de una prohibición general de fumar en todos los espacios públicos cerrados, lo cual alimentó el debate sobre la necesidad de una legislación común a los 27 países europeos.
En Europa, Irlanda fue el primer país en impedir totalmente el tabaco en los lugares públicos el 29 de marzo de 2004. Su ejemplo fue seguido en mayor o menor medida por Noruega (no miembro de la UE), España, Italia, Malta, Suecia, Escocia, Letonia y Lituania.
En Francia, el tabaco es la primera causa de la llamada mortalidad evitable. En total, 66.000 fumadores mueren anualmente en este país, según el ministerio de Salud, y a ellos se suman 5.000 consumidores pasivos.