Los problemas internos en la selección francesa ya fueron superados y ahora los futbolistas están concentrados en vencer a España en los cuartos de final de la Eurocopa, afirmó hoy el entrenador asistente Alain Boghossian.
Dos años después del fracaso del Mundial, la selección francesa tuvo otro incidente de disputas en el seno del plantel luego de la derrota del martes 2-0 ante Suecia en el cierre de la etapa de grupos. El grupo se reunió el miércoles para aliviar las tensiones.
«El fuego se extinguió. No hay fisuras. Todos dijeron lo que tenían que decir», comentó Boghossian antes del partido del sábado contra los campeones mundiales y europeos. «Todos conversamos en el almuerzo y las cosas se calmaron. Luego tuvimos una pequeña reunión tras la cena».
La prensa reportó sobre discusiones entre jugadores, y entre jugadores y el cuerpo técnico, pero Boghossian aseguró que la situación no se parece a la crisis que hubo hace dos años en Sudáfrica, donde los futbolistas boicotearon un entrenamiento.
«No hay comparación», afirmó. «Estas cosas suceden, no podemos taparnos los ojos. La tensión es normal cuando pierdes. Si todos estuviesen sonrientes después de una derrota, entonces nosotros (el cuerpo técnico) nos hubiésemos enojado aún más».
Boghossian cree que Francia podría beneficiarse por airear sus problemas.
«Creo que es algo positivo, porque al menos las cosas están claras entre nosotros», señaló. «Hubo algunos altercados (verbales), algunos intercambios. Es como cuando estás en una relación, si barres los problemas bajo la alfombra, entonces las cosas van a explotar».
Boghossian, un mediocampista en la selección francesa que ganó el Mundial de 1998, expresó preocupación por la ausencia de un líder en el plantel que calme las aguas cuando hay problemas.
«Nadie destaca como líder en la cancha. El problema no se resolverá antes del sábado», dijo. «No puedes chasquear los dedos y decir, ‘esperemos que llegue un líder’, o apuntar a alguien y nombrarlo líder».
«El líder llegar de forma natural, o si no hay uno, haces las cosas de forma distinta».
El mediocampista Franck Ribery se retiró el miércoles del entrenamiento de la selección francesa en la Eurocopa, mientras que Samir Nasri fue enviado a descansar como medida de precaución.
Ribery había trotado unos minutos cuando se detuvo y se agarró el tobillo izquierdo antes de retirarse para recibir tratamiento. El mediocampista Nasri recibió un golpe en la rodilla derecha durante la derrota del martes por 2-0 ante Suecia y se quedó en la banca.
Francia enfrenta a España en Donetsk el sábado por los cuartos de final.
Las tensiones están infiltrándose en el campamento francés de la Eurocopa después que los jugadores protagonizaron una «acalorada» discusión en el camerino tras perder 2-0 ante Suecia.
Francia, que se vio plagada por problemas internos en el Mundial de 2010, fue un desastre el martes contra los suecos y hubiese perdido por goleada de no ser por las atajadas del portero Hugo Lloris.
Les Bleus avanzaron de todas maneras a los cuartos de final, donde enfrentarán a España, pero la forma en que lo hicieron provocó molestias entre el técnico Laurent Blanc y veteranos como Florent Malouda.
«Sí, las cosas se pusieron un poco acaloradas, pero luego todo el mundo se dio un duchazo frío», dijo Blanc el miércoles. «Demuestra que había un poco de electricidad. Y espero que la haya frente a España, porque la necesitaremos».
Malouda eligió no hablar con la prensa después de la derrota porque tenía miedo de decir algo inadecuado. Es el jugador más experimentado de Francia y formó parte de una selección mundialista que dejó boquiabierto a su país al declararse en huelga en un entrenamiento hace dos años después que Nicolas Anelka fue expulsado y enviado de vuelta a casa.