Franceses esperan debate final


Mitin. Miles de partidarios de la candidata socialista Ségolí¨ne Royal se congregaron en el estadio Charlety de Parí­s para el cierre de campaña.

La socialista Ségolí¨ne Royal y el candidato conservador Nicolas Sarkozy se enfrentan hoy por la noche en un debate en televisión en el que, a cuatro dí­as de las elecciones presidenciales, intentarán conquistar el voto de los indecisos.


La expectativa de este encuentro frente a frente radica no sólo en que se trata del primer careo público entre ambos, sino porque tienen como desafí­o atraer el voto de los 6,8 millones de franceses que en la primera ronda electoral, el pasado 22 de abril, votaron al centrista Franí§ois Bayrou.

Aunque éste no ha dado consigna de voto a sus partidarios, ha criticado más a Sarkozy –vencedor de la primera ronda y favorito del domingo– que a Royal, con quien además mantuvo un amistoso debate la semana pasada.

Quien sí­ se pronunció ante la segunda ronda del domingo fue el lí­der de extrema derecha Jean-Marie Le Pen, quien pidió la abstención a un 10% de potenciales votantes a Sarkozy.

Según una encuesta publicada este miércoles, el candidato de derecha obtendrí­a el domingo el 53,5% ( 0,5) de los sufragios frente al 46,5% (-0,5) de Royal.

Sarkozy quitó hierro este miércoles al peso del debate. «No creo que los franceses elijan a un presidente para cinco años con la única impresión de un debate de dos horas», declaró a la radio France Inter, y añadió: «No soy de los que exageran hasta ese punto la importancia de un debate».

Por su parte, el primer secretario del Partido Socialista y compañero de Ségolí¨ne Royal, Franí§ois Hollande, declaró en la cadena de televisión LCI que el debate debe «mostrar» que el proyecto del candidato de la derecha «es peligroso para los franceses».

Hollande dijo esperar que su candidata demuestre que su proyecto es «no sólo el mejor en cuanto a empleo, crecimiento, solidaridad, sino que es el más creí­ble».

La socialista se dijo el martes «preparada» para el debate. «Toda mi vida polí­tica se ha hecho con diálogos y debates, no he huido de ninguno», tranquilizó.

Para el ex presidente conservador Valéry Giscard d’Estaing, este duelo es «el punto culminante de la campaña» presidencial.

Sarkozy, de 52 años y descendiente de inmigrantes húngaros y griegos, ha basado su primera campaña presidencial en la necesidad de mano dura ante la inseguridad y la inmigración ilegal, con un discurso agresivo que ha suavizado en la fase final de la campaña para intentar disipar las crí­ticas y atraer el voto de centro.

Por su parte, Ségolí¨ne Royal, de 53 años y que también se estrena en una campaña presidencial, la ha basado en denunciar las maneras y el contenido «brutal» del proyecto de Sarkozy y en subrayar que ha tomado buena nota de las necesidades de la población y de todo el espectro que le puede votar el domingo: la extrema izquierda, la izquierda y el centro.

Se espera que más de 20 millones de personas vean este duelo televisado entre un candidato que gusta de alzar el tono y su oponente socialista, que prefiere el discurso pausado y amable.

«Drácula y Mary Poppins compiten por los últimos votos en la pantalla», caricaturiza este miércoles el diario británico The Times.

El desempleo, la reducción del poder adquisitivo, la alta deuda pública, la visión de un Estado obsoleto, la inmigración, la inseguridad y el clima de crisis social en las grandes ciudades y el recelo que despierta Europa están entre las preocupaciones ciudadanas y entre los retos inminentes del nuevo presidente.