Firman acuerdo comercial


Bloqueo. Cuba atraviesa serios problemas económicos a consecuencia del bloqueo impuesto por Estados Unidos desde hace 45 años.

Los gobiernos de Cuba y del Estado de Nebraska (centro de Estados Unidos) firmaron ayer un acuerdo para que la isla compre alimentos por 17,5 millones de dólares, al tiempo que abogaron porque se levanten restricciones del embargo impuesto por Washington hace 45 años.


«Los acuerdos que estamos firmando hoy representan la continuación y la ampliación de las relaciones entre Nebraska y Cuba», afirmó el gobernador del estado norteamericano, Dave Heineman, refiriéndose a convenios suscritos en 2005 y 2006 por un total de 60 millones de dólares, a los que quedó pendiente el firmado por 17,5 millones de dólares.

En su tercer viaje de negocios a Cuba, Heineman suscribió el convenio con Pedro Alvarez, presidente de la empresa cubana Alimport -que tiene el monopolio sobre las compras de alimentos a Estados Unidos-, en un acto celebrado anoche en el Hotel Palco.

El acuerdo se refiere a la compra de 75 toneladas de trigo a la empresa Louis Dreyfus y carne de cerdo a la compañí­a Farmland. Los convenios de 2005 y 2006 incluyen además productos de res y pavo, frijoles, soja, maí­z.

El gobernador, quien dijo esperar que en el futuro se logren firmar otros acuerdos, llegó el lunes a Cuba al frente de una misión de 30 empresarios, la mayor de Nebraska que haya visitado Cuba, a fin de impulsar el comercio agrí­cola, pese al embargo con el que Washington presiona por una transición polí­tica en la isla.

«Hemos estado trabajando con nuestra delegación en el Congreso para expresarles nuestro interés de abrir más avenidas para el comercio con Cuba y vamos a seguir haciéndolo», manifestó Heineman, al aclarar que realiza esa labor con mucho cuidado para no inmiscuirse en los asuntos del Congreso.

Alvarez, por su parte, expresó su satisfacción por los acuerdos firmados por las dos empresas estadounidenses y lamentó que las restricciones del embargo económico «pongan a las empresas de Estados Unidos en franca desventaja».

Destacó que Cuba pretende comprar a Estados Unidos este año entre 1.600 y 1.700 millones de dólares en alimentos, pero que hasta ahora solo contrató 108 debido a las restricciones.

«Cuba ha invertido cientos de millones de dólares en otros paí­ses», dijo Alvarez, al señalar que esos montos pudieron haber sido destinados a la compra de alimentos a empresas norteamericanas que «son serias y eficientes» y están más cerca de las costas cubanas.

El embargo de Washington prohí­be el comercio con Cuba, pero una ley aprobada por el Congreso en 2001, cuando la isla fue azotada por el huracán Michelle, autorizó las compras, en efectivo, de alimentos y otros productos estadounidenses.

De acuerdo con cifras de la empresa cubana, la compra de alimentos y productos agrí­colas estadounidenses creció todos los años de 4,4 millones de dólares en 2001 a 550 millones en 2006, con un acumulado de 2.084,4 en ese periodo.

No obstante, según las estadí­sticas estadounidenses, que no incluyen gastos de transporte y seguros como lo hace Alimport, el valor de la compra fue de 4,3 millones de dólares en 2001, 138,6 millones en 2002, 257 en 2003, 392 en 2004, bajó a 350,2 en 2005 y a 340,4 en 2006; para un total de 1482,3 millones de dólares.

La visita de Heineman se produce a un mes de que el secretario de Comercio de Estados Unidos, el cubano-estadounidense Carlos Gutiérrez, defendiera enérgicamente el embargo, para presionar por una transición polí­tica en Cuba, gobernada por Raúl Castro temporalmente desde el 31 de julio, debido a que su hermano Fidel convalece de una cirugí­a.

El gobierno de Estados Unidos ha rechazado una flexibilización del embargo, propuesto por algunos congresistas.