Una finca presidencial que fue otorgada a una fundación por el ex presidente í“scar Berger para dar capacitación a ex pandilleros tomará de nuevo su función ahora que ésta pasa a manos de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia, (SAAS).
Andrea Orozco
aorozco@lahora.com.gt
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El terreno de 267 mil metros cuadrados fue utilizado como un centro de capacitación para jóvenes que integraban pandillas, sin embargo, al no tener éxito, fue el Ministerio de Cultura y Deportes el que pretendió continuar con el proyecto, pero tampoco lo logró.
Ahora la Finca Santo Tomás, en Escuintla, volverá a ser una residencia presidencial a cargo de la SAAS.