Los padres preocupados por los bajos niveles de arsénico en el jugo de manzana se sentirán ahora mejor al adquirir uno de los refrescos favoritos de sus niños.
WASHINGTON /Agencia AP
La Administración de Alimentos y Medicinas (FDA, por sus siglas en inglés) estableció nuevos límites en los niveles de arsénico permitidos en el jugo de manzana, tras más de un año de presión pública de grupos consumidores preocupados por los efectos que el contaminante tenga en los niños. A nivel nacional, el de manzana es el segundo jugo favorito tras el de naranja, según grupos industriales.
Los estudios han demostrado que ese jugo contiene niveles muy bajos de arsénico, un agente carcinogénico encontrado en todo tipo de productos, desde el agua, a la tierra e insecticidas. La FDA ha vigilado la presencia de arsénico en el jugo de manzana desde hace décadas y ha dicho por mucho tiempo que los niveles no son peligrosos para los consumidores, en especial los niños de corta edad aficionados al jugo.
Ahora, el organismo ha adoptado normas estrictas sobre los niveles tolerables de arsénico en el jugo de manzana, limitando la cuantía al mismo nivel permitido en el agua potable.
Bajo las nuevas normas, el jugo de manzana que contenga más de 10 partes por mil millones podría ser retirado del mercado y las empresas productoras podrían encarar medidas legales. Los funcionarios del organismo insistieron que la gran mayoría del jugo disponible en el mercado tiene ya niveles inferiores a los exigidos.
«En general, el suministro de jugo de manzana es muy seguro y no representa una amenaza para la salud pública», dijo la comisionada de la FDA, la doctora Margaret Hamburg, en una entrevista con AP. «Decidimos presentar esta propuesta para dar una guía a la industria y para asegurar la seguridad y calidad vigente».
Un análisis de la FDA de decenas de muestras de jugo de manzana descubrió el año pasado que el 95% están por debajo del nuevo nivel.