El líder cubano Fidel Castro dio un espaldarazo a las reformas económicas de su hermano Raúl Castro, al evocar un histórico discurso en el que hace cinco años advirtió de la urgencia de rectificar «errores» para evitar el derrumbe de la revolución.
«Me sorprendió la actualidad de las ideas expuestas que, cinco años después, son más actuales que entonces, ya que muchas se relacionaban con el futuro, y los hechos se han ido comportando tal como fueron previstos», expresó Fidel Castro en un encuentro con estudiantes.
El líder cubano, de 84 años y quien cedió el poder a su hermano en 2006 al caer enfermo, dijo ratificar las palabras que pronunció en el Aula Magna de la Universidad de La Habana el 17 de noviembre de 2005, cuando fustigó la corrupción, el exceso de subsidios, el derroche y la ineficiencia.
«Aquel discurso levantó ronchas, dado el momento que estábamos viviendo frente a un poderoso enemigo que nos amenazaba cada vez más, bloqueaba férreamente nuestra economía y se esforzaba por sembrar el descontento», contó a cientos de estudiantes de secundaria y universitarios.
El pasado fin de semana, el gobernante Raúl Castro afirmó que «no queda más alternativa» que ejecutar las medidas y que «las ideas de Fidel están presentes» en esas políticas que debatirá en abril el VI Congreso del Partido Comunista (PCC) para «actualizar el modelo económico».
El programa incluye el recorte de más de un millón de empleos, la apertura a la iniciativa privada y al capital extranjero, la descentralización económica, la eficiencia empresarial, el aumento de la productividad, la eliminación de subsidios, el ahorro y la lucha contra el robo de recursos del Estado que van a dar al mercado negro.
En su discurso de hace cinco años, de unas seis horas, Fidel Castro alertó que la revolución podía autodestruirse y llamó a la unidad de los cubanos para corregir el rumbo por ser «una cuestión económica vital».
«Hemos cometido muchos errores, y son los errores que estamos tratando de rectificar, si quieren, que estamos rectificando. Entre los muchos errores que hemos cometido todos, el más importante error era creer que alguien sabía de socialismo, o que alguien sabía de cómo se construye el socialismo», admitió.
Raúl Castro, de 79 años, advirtió recientemente que las medidas son necesarias para evitar que la revolución «caiga al precipicio», y hace dos meses Fidel sorprendió con su frase: «el modelo cubano ya no funciona ni siquiera para nosotros».
«Estamos actuando, estamos marchando hacia un cambio total de nuestra sociedad (…) el país tendrá mucho más pero no será jamás una sociedad de consumo», dijo en en 2005 Castro, quien aunque renunció a la presidencia conserva el poderoso cargo de primer secretario del PCC.
El gobierno de Raúl Castro planea eliminar una serie de subsidios como la «libreta de abastecimiento», símbolo del igualitarismo de la revolución, que garantiza desde 1963 a los cubanos una canasta básica insuficiente, pero a centavos de dólar.
«Cero derroche. (…) No somos un país capitalista, en que todo se deja al azar. Subsidios o gratuidades, solo en cosas esenciales y vitales», había dicho Fidel al respecto, tras criticar que en Cuba «un ladronzuelo» que vende gasolina robada gana 40 o 50 veces más que un médico y goza de servicios grautitos.
El diario Granma, del PCC, llamó este miércoles al debate popular pues el plan de reformas está «pidiendo a gritos» un «cambio de mentalidad» en los cubanos, a fin de propiciar un despegue económico.